Las cualidades del liderazgo auténtico

Viaje a las emociones ofrece ejemplos interesantes para que los directivos de nuestras empresas puedan reconocer sus emociones. Por ejemplo, los miedos a tomar las decisiones operativas sobre personas. Ningún líder debe mirarse al espejo y puede decir: "Yo soy auténtico". La autenticidad se puede definir, en gran parte, por el modo en el que te ven los seguidores, y a través de su percepción podemos regular nuestro yo más auténtico.

Por otro lado, el liderazgo exige la expresión de un auténtico yo. No podemos copiar las emociones de Richard Branson, Michael Dell o Steve Jobs, porque cada persona debe expresar su personalidad auténtica, refiere Eduardo Punset.

Frente a los turbulentos momentos que nos ha tocado compartir, podemos expresar nuestro desencanto por la mediocridad de los líderes europeos actuales, que han creado un sentimiento de sospecha constante frente a sus decisiones. Podríamos asociar la autenticidad con los valores sociales de integridad, sinceridad, honestidad, confianza y compromiso. Para Punset, el devenir histórico de las personas marca los hitos de los avances sociales en cada etapa. Desde las cavernas a las grandes ciudades, los líderes han demostrado capacidad de iniciativa y compromiso social en situaciones de crisis.

Asimismo, la dificultad de liderar la crisis actual se refleja en la complejidad para encontrar el equilibrio entre expresar las opiniones como personas y liderar para influir en nuestros seguidores. Sin embargo, las competencias necesarias son precisamente las que pueden distinguir a los líderes de verdad de los demás ejecutivos. Por tanto, el desafío de un liderazgo auténtico es gestionar la propia autenticidad, aunque suene, sin duda, paradójico. Porque al perder la autenticidad, el líder se mueve en disonancias y falta de coherencia en sus decisiones estratégicas.

Es decir, los líderes auténticos se centran en su compañía, pero nunca pierden de vista de dónde proceden por humilde que sea su condición. Para Punset, estas categorías personales representan las intuiciones que cada persona lleva en su interior, y que no todos se atreven a utilizar por miedos personales.

El conocimiento de uno mismo y la pasión por el progreso social respetando los valores de la familia cumple los requisitos de un trabajo bien realizado.

Ceferí Soler, profesor de Esade