_
_
_
_
_
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Los municipios también piden su parte

Cerrado institucionalmente el nuevo modelo de financiación autonómica, a falta de conocer los detalles sobre el reparto de la inyección adicional de algo más de 11.000 millones de euros que aportará Hacienda, los ayuntamientos quieren acelerar la negociación para cuadrar un acuerdo de financiación local que satisfaga las necesidad de unas arcas municipales no menos exhaustas que las autonómicas o las estatales. La dependencia cíclica de las finanzas de las corporaciones locales de la actividad económica ha llevado sus cuentas a los números rojos en la gran mayoría de los ayuntamientos, sobre todo a aquellos que habían estirado el gasto estructural en función de la actividad residencial, paralizada en los dos últimos años.

Además del agotamiento de la actividad inmobiliaria, el recurso a las subidas del impuesto sobre bienes inmuebles está prácticamente agotado, y únicamente la vía del endeudamiento puede ser consideraba como asidero presupuestario en tiempos de crisis, siempre que las corporaciones tengan el tamaño crítico suficiente como para acudir a la banca o a los mercados financieros a comprometerse con nuevas obligaciones de pago.

La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) quiere rescatar el viejo compromiso político de extender una parte de la cesión tributaria de las comunidades autónomas, ahora ampliada, hacia los municipios. Además de culminar así la descentralización de manera natural, serviría para que las comunidades resarciesen a los ayuntamientos de una buena parte de las competencias de las que hacen dejación y cuya gestión y financiación corre hoy a cargo de los municipios. Las cuantificaciones que en el pasado se han hecho de este tipo de competencias ejercidas por unos por dejación de otros han llegado incluso a superar los 6.000 millones, y se concentran en servicios sociales, educativos y sanitarios, con un coste creciente en los últimos años, aunque de forma asimétrica, por el fuerte crecimiento de la población inmigrada.

Los procesos de revisión de los mecanismos de financiación siempre se reactivan cuando los gastadores no tienen dinero, como se ha visto con las regiones, prácticamente todas ellas en déficit este año. Aprovechando el esfuerzo que hace el Estado cediendo cuotas notables de participación en los grandes impuestos, así como capacidad normativa casi plena sobre los mismos, debería estirarse el ejercicio para definir y ejecutar un mecanismo definitivo de financiación de los municipios. En él deben quedar claras cuáles son sus competencias, cuáles de las comunidades y cuáles del Estado, para proporcionar las herramientas para financiarlas, disponiendo también de plena autonomía sobre ellas. Sólo así los administrados sabrán a quién le pagan cada impuesto, tributo o tasa, y a qué se destina su esfuerzo fiscal, y podrán ejercer su labor fiscalizadora sobre el gasto con la soberanía política del sufragio.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Archivado En

_
_