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Columna
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Financiación local euro-árabe

Málaga ha acogido recientemente el II Euro-Arab Cities Forum. En la cita se han reunido representantes de las ciudades y regiones más representativas de los países europeos y árabes, que han intercambiado y debatido en cuatro mesas redondas plenarias dedicadas, respectivamente, al gobierno local; la gestión sostenible de las ciudades y sus servicios municipales; la cultura, patrimonio y turismo, y los instrumentos financieros.

Fruto del debate en esta última mesa, presidida por el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre Prados, ha sido la declaración de Málaga sobre financiación de los municipios y ciudades. La misma pone de relieve cómo los problemas financieros, pese a las diferencias evidentes en la legislación aplicable y en la situación económica, son bastante similares. Así, se recalca que para que exista una auténtica autonomía local es necesaria la autonomía financiera. A tal efecto los Gobiernos centrales y regionales han de velar por adecuar su normativa para conseguir esta finalidad.

En caso de que se produzcan transferencias de servicios desde estos Gobiernos hacia los municipios y ciudades, las mismas han de contar con financiación específica. De este modo se les ha de compensar por cualquier supresión de un tributo local que los primeros lleven a cabo. En definitiva, aplicar el principio de lealtad institucional entre las distintas Administraciones. El modelo de financiación ha de tener en cuenta el factor de población, de forma que se acepte el mismo como elemento diferencial.

Los municipios y ciudades han de fomentar la exigencia de tasas y precios por la prestación de servicios que afectan, directamente, a un grupo de ciudadanos. Por tanto, carece de sentido que sean financiados con cargo a impuestos. De igual modo, incidir en la colaboración público-privada para la construcción de nuevas infraestructuras.

También han de fomentar el desarrollo de actividades económicas que no son realizadas por el sector privado a través de la creación de empresas públicas. Una vez que las mismas sean rentables pueden formar parte de los instrumentos financieros locales.

Todos han de comprometerse a una gestión eficaz de sus recursos en defensa de los intereses generales, así como establecer, como criterio fundamental para la sostenibilidad de la prestación de los servicios públicos, el que todas las transferencias que reciban de otras Administraciones lo sean de manera incondicionada. Las de otro tipo afectan claramente a la autonomía local.

Por último, el resto de poderes públicos debe dotar a los municipios y ciudades de figuras tributarias elásticas y no solo basadas en la imposición inmobiliaria.

Como puede comprobarse, muchas de estas previsiones son directamente aplicables a nuestro país, donde la reforma de la financiación local ha sido aplazada sine díe, pese a las reivindicaciones formuladas desde la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP). De aquí la relevancia de esta declaración. La diversidad de los distintos municipios y ciudades presentes en el fórum ponen de relieve que, pese a lo que se suele mantener, estamos ante una reforma necesaria e ineludible y que no obedece tan solo a la actual situación de crisis económica que vive España.

Javier Martín Fernández. Socio director de F&J Martín Abogados. Profesor titular de Derecho Financiero y Tributario de la Universidad Complutense

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