_
_
_
_
_
Romana capta 245 millones y hace socios a Iberdrola y Banco Caminos

Sareb vuelve a apoyarse en la banca en su nueva ampliación de capital

Sareb amplió capital ayer en 245 millones y sumará el triple en deuda subordinada a finales de febrero, para compensar la absorción del ladrillo de las entidades del grupo 2. La banca ya asociada, que se comprometió a poner hasta 475 millones más entre capital puro y deuda, ha vuelto a ser el gran apoyo de Sareb, cubriendo la mitad de la operación. Solo Iberdrola y Banco Caminos entran como nuevos socios.

La gran banca volvió a salir ayer al rescate de Sareb, del que ya era la principal accionista privado, para cubrir la mitad de la nueva ampliación de capital aprobada. En concreto, el consejo de administración del banco malo dio luz verde en la tarde de ayer a una ampliación de 245 millones que le permitió alcanzar los 1.200 millones de capital puro. La cifra es solo un 25% de los recursos extra que obtendrá la última semana de febrero mediante la emisión un nuevo paquete de deuda subordinada. El objetivo es sumar 4.800 millones de euros en recursos propios (1.200 de capital y 3.600 de deuda) para el 28 de febrero, cuando Sareb absorberá la carga tóxica de las entidades del grupo 2.

Se trata de Liberbank, BMN, Ceiss y Caja 3, que venderán al banco malo unos 15.000 millones de euros entre inmuebles adjudicados y créditos relacionados con la construcción, como ya hicieran, Bankia, Catalunya Banc, Novagalicia y Banco de Valencia, el 31 de diciembre de 2012, por un valor de 37.110 millones. La idea es que la ampliación de ayer y la nueva emisión de deuda permitan a Sareb seguir manteniendo un 8% de recursos propios frente al total de la carga inmobiliaria.

La expectativa inicial era que esta nueva ampliación de capital (la tercera celebrada) fuera una puerta de entrada para nuevos inversores, a ser posible internacionales, que dieran más credibilidad al proyecto. La realidad es, sin embargo, que han sido los accionistas originales, con la banca y el FROB a la cabeza, quienes han cubierto la práctica totalidad de la operación. Sareb, de hecho, solo gana dos nuevos accionistas. Se trata de Iberdrola Inmobiliaria, que aporta 2,5 millones de capital, y de Banco Camino, ligado a los ingenieros, con unos 800.000 euros.

Los grandes fondos internacionales que vienen negociando con la firma, sin embargo, terminaron quedándose fuera. Cerberus, Fortress y Centerbridge, entre otros de los llamados "fondos buitre", se habían ofrecido a entrar en capital de Sareb a cambio de derechos preferentes de compra sobre determinados paquetes de activos. Los más líquidos, los de vivienda terminada.

Santander, CaixaBank, Sabadell y Popular, con seis de los 15 asientos del consejo de administración de Sareb, se han opuesto, sin embargo, a dar facilidades a estos fondos para comprar barato y sacar rentabilidad aun vendiendo a bajo precio, mientras que ellos mismos siguen luchando por deshacerse de su propio stock sin asumir más pérdidas en el intento.

El rechazo de estas propuestas, pese a las necesidades de captación de capital reseñadas, ha sido una decisión relativamente cómoda teniendo en cuenta que los cinco grandes bancos asociados (sumando a Kutxabank) se han comprometido a aportar hasta 475 millones de euros más en esta ronda de capital y deuda subordinada.

Así, la gran banca aportó 123,6 millones de los 245 de la ampliación de ayer, mientras que el FROB, que soporta el 45,7% del capital, puso otros 109 millones. El resto de accionistas de Sareb, además, también participaron en la aportación con unos 10 millones extra, con lo que el proceso de captación de inversores ha sido en esta ocasión mucho más relajado que en la capitalización inicial.

Finalmente, Sareb sí ha logrado el compromiso de las aseguradoras extranjeras Generali, Reale y Zurich para suscribir deuda subordinada en la próxima emisión. Lo mismo hará Santa Lucía. Estas cuatro firmas se unen al destacado grupo de aseguradoras (Mapfre, Axa, Mutua Madrileña, Catalana Occidente, Mutua Pelayo y Asisa) que ya invierten en el banco malo. Una decisión recientemente incentivada por el Gobierno, que ha permitido computar como provisiones este desembolso, al igual que ocurre con otras de sus inversiones.

Críticas desde el sector del capital riesgo

La negativa de Sareb a dar entrada en su capital al grupo de fondos buitre encabezado por Cerberus, Fortress y Centerbridge, que pedían a cambio acuerdos preferentes de compra de activos, ha sido recibida entre críticas y cierto escepticismo entre las firmas de inversión. "Tendrán que revisar su política comercial si quieren vender", apuntan desde una firma que ha estado en contacto con el equipo gestor que encabeza Belén Romana. Más allá de lo oportuno de aceptar la oferta de los fondos buitre, desde el sector del capital riesgo apuntan que la negativa frontal de Sareb a aceptar estas condiciones revela "el conflicto de interés" que supone tener a la banca sentada en el consejo de administración de la sociedad mientras compiten con ella en la venta de pisos. Potenciales inversores, de otra parte, echan de menos un plan estratégico más creíble -KPMG trabaja en el diseño de un nuevo marco- y, sobre todo, critican la falta de control que aún reina en Sareb sobre el volumen y las características de los activos que pretenden vender.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Archivado En

_
_