Lagunas en los límites a la paga de los banqueros
El diablo está en los detalles, dice el refrán. Y aunque anunciadas a bombo y platillo, las cortapisas impuestas por el Gobierno a las retribuciones y las indemnizaciones de los responsables de bancos y cajas que han sido auxiliados con dinero público dejan puntos sin resolver. Es la terra incognita del BOE.
El Ejecutivo que lidera Mariano Rajoy ha hecho de las reformas estructurales su caballo de batalla. La reforma financiera y la laboral han sido las dos grandes gestas de los primeros 100 días de Gobierno. Estos textos acotan los salarios de los banqueros y marcan límites a las indemnizaciones por despido de directivos de entidades con ayudas públicas.
Las retribuciones de los ejecutivos que han llevado a la quiebra o empujado a un punto límite a entidades de crédito han generado malestar entre la opinión pública. Este sentimiento se ha visto acentuado por la crisis económica, el paro galopante y los apoyos públicos otorgados a las firmas en apuros. Por eso, el Gobierno del PP ha realizado un guiño a la ciudadanía en plena ronda de recortes y sacrificios sociales y penalizado a los gestores.
La realidad, sin embargo, es compleja y los límites a las retribuciones de los banqueros dejan incógnitas abiertas y áreas sin resolver. Así lo reconocen varios expertos legales consultados.
El real decreto ley para el saneamiento del sector financiero impone un límite de 300.000 para la retribución los máximos directivos de las entidades de crédito cuyo mayor accionista sea el Estado (Novagalicia, Unnim y Catalunya Caixa) y de 600.000 para aquellas con algún otro tipo de apoyo público (Bankia, Banca Cívica, BMN, Liberbank, Caja España Duero).
Dos abogados laboralistas de un prestigioso bufete admiten en privado que "si el Estado se convierte en accionista de referencia de una entidad está claro que puede limitar la paga como crea conveniente, pero es discutible si puede hacerlo en las que han recibido apoyos puntuales como la compra de preferentes". Y recuerdan cómo, "en el pasado se ha ayudado a muchos sectores como la automoción, el naval o la minería, pero jamás se habían limitado las retribuciones".
Otra nebulosa se levanta en torno a la palabra "retribución". "La norma menciona bajo este concepto la paga fija, variable y las dietas, pero no alude a las aportaciones a planes de pensiones ni a seguros de vida. En rigor, estas no son retribución sino una mejora voluntaria de la protección social", señala Guillermo García, socio laboralista de Cuatrecasas, Gonçalves Pereira.
El texto de la reforma financiera fue aprobado el pasado jueves en el Congreso por una amplísima mayoría (90%). Su articulado indica que las tres entidades controladas por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) "no percibirán durante 2012 retribución variable ni beneficios de pensiones". ¿Pero a qué se refiere? ¿Al bonus generado en 2011 que se percibe este año o al logrado con cargo al ejercicio en curso y que se devenga en 2013?
Se da la circunstancia adicional de que buena parte de las medidas penalizan a personas que no estaban a cargo de las entidades cuando se generaron los problemas. El caso más evidente es el de Novagalicia Banco. Tanto su presidente José María Castellanos, como el consejero delegado César González-Bueno, dejaron puestos prestigiosos por tomar las riendas del ya atribulado grupo gallego para ver sus retribuciones sensiblemente mermadas.
En la reforma laboral se elimina el "derecho a indemnización" de ejecutivos sancionados por el Banco de España. Pero según reconoce José Manuel Mateo, coordinador de banca en el departamento de Laboral de Garrigues, "esto solo afecta a la indemnización por despido y no abarca los derechos por pensiones".
El punto en el que todos los expertos legales coinciden es que los límites impuestos no se aplicarán, precisamente, a quienes han desatado la polémica o cometido abusos por haberse rescindido ya sus contratos. "Las normas no son retroactivas cuando son perjudiciales. Esto es una disposición nueva y se aplicará para casos futuros", remata Guillermo García.
Transparencia y responsabilidad en la retribución
Las retribuciones tienen efectos determinantes sobre el desempeño de una empresa y su sostenibilidad a largo plazo al ser el mecanismo para atraer al talento. A los mejores. Por eso, la política salarial es objeto de análisis por parte de economistas."Los sistemas de compensación son importantes en los bancos porque pueden generar incentivos perversos", afirma Pablo de Andrés, catedrático de Finanzas de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM). A su juicio, "lo más importante no es la cantidad de compensación, aunque socialmente tenga sus implicaciones, sino su estructura".La crisis financiera desatada en EE UU en 2007 y contagiada después al resto del mundo ha manifestado el lado más perverso de los bonus. No eran transparentes, obedecían a políticas de resultados a corto plazo, favorecían la asunción excesiva de riesgos, prestaban una atención dispar a los intereses de cada stakeholder (accionistas, bonistas, depositantes...) y no existían mecanismos de recuperación de la retribución en caso de pifias (claw-back clauses).De Andrés admite que "es difícil determinar qué es justo en materia retributiva. Existe un consenso en que la paga se debe repartir entre fija y variable, y estar vinculada a los resultados a medio y largo plazo de la empresa. Además, es importante que haya transparencia y se sepan las cosas". Conscientes del problema, las autoridades europeas han puesto en marcha un código de buenas prácticas retributivas.
Novedades
Áreas grisesl Retribución: la norma limita la paga fija, variable y las dietas en entidades con ayudas públicas. La medida puede afectar a las pensiones y seguros de vida, aunque en sentido estricto estos son beneficios sociales.l Campo de acción: es cuestionable si el Estado puede condicionar contratos privados firmados por empresas que no son de su propiedad y su alta dirección.l Retroactividad: los expertos coinciden en que la norma no podrá corregir los abusos cometidos en el pasado.l Indemnización: limitar el finiquito no impide a un directivo percibir en el futuro su pensión privada.