El empuje de los bancos devuelve al Ibex por encima de los 10.000 puntos

La jornada festiva de la Inmaculada Concepción terminó resultando muy beneficiosa para el Ibex 35. El selectivo lideró las ganancias entre los grandes índices bursátiles, con un avance del 1,55%, que le permitió cerrar en 10.078,4 puntos. Eso sí, la jornada estuvo marcada por la escasez de volumen de negociación, que apenas superó los 2.000 millones de euros en el saldo neto del mercado continuo, es decir, excluidos los bloques y operaciones especiales.

El índice llegó a franquear los 10.100 puntos a la apertura de Nueva York, aunque luego perdió fuerza. El empuje de los bancos fue decisivo para llevar al Ibex al terreno de los 10.000 puntos, un nivel que había perdido a comienzos de semana. Todas las entidades listadas en el selectivo registraron importantes alzas. Sabadell subió un 3,14%; BBVA, un 2,96%; Bankinter, un 2,57%; Popular, un 2,5%; Banesto, un 2,43% y Santander, un 2,38%.

La pujanza de la Bolsa española contrastó con la falta de fuerza de otros índices, como el Dax de Fráncfort, que perdió un 0,37%, o el Footsie de Londres, que se dejó un 0,24%. El Euro Stoxx mejoró un 0,58% y el Cac parisino, un 0,56%. El hecho es que los índices europeos están en una dinámica completamente opuesta a la de la Bolsa española. Europa está tentando la zona de máximos de 2010, lo que ha provocado que, a falta de poco más de tres semanas para concluir el año, las subidas se hayan moderado. En cambio, el selectivo español retrocede aún un 17,5% respecto a los niveles que llegó a alcanzar en enero pasado.

"Es una buena señal que el Ibex cierre por encima de las resistencias de 10.040-10.050 puntos", opina Luis Benguerel, director de renta variable de Interbrokers. Pero inmediatamente advierte: "La Bolsa sigue estando mal y veremos cómo afronta la próxima resistencia importante, que está en 10.350 puntos". Benguerel cree que el Ibex tiene posibilidades de concluir el ejercicio en el nivel de los 11.000 puntos, pero "solo en el mejor de los casos y siendo muy optimista". De finalizar en ese entorno, esto supondría un retroceso del 7,87% en el año 2010.

Los analistas de Caja Madrid Bolsa pronostican que el año 2011 será "muy volátil", pero puede que fructífero, pues sitúan el nivel objetivo del Ibex en 12.500 puntos. Para aprovechar las potenciales rentabilidades, el consejo de Caja Madrid Bolsa es tomar posiciones en telecomunicaciones, petróleo y construcción, un sector que ha perdido el 50% de su capitalización bursátil desde el estallido de la crisis.

Por otra parte, en Wall Street ayer hubo mucha indefinición. Los analistas pensaban que la decisión del Gobierno de Barack Obama de retrasar el fin de las ayudas fiscales a las rentas más altas sentaría muy bien en el mercado. Pero lo cierto es que éste abrió ligeramente a la baja y solo en la última parte de la sesión empezaron unas subidas que fueron muy tímidas. Aunque fueron suficientes para que el S&P y el Nasdaq marcaran máximos anuales. Al final, el Dow subió un 0,12%; el S&P, un 0,37% y el Nasdaq, un 0,41%. El recorrido parece agotado este año para la Bolsa de Nueva York, ya que los índices están en los niveles más altos desde la caída de Lehman Brothers en septiembre de 2008.

Problemas para la deuda alemana

El carácter de valor refugio de los bonos alemanes ha presionado tanto a la baja el precio del activo, que ha terminado por perder atractivo a ojos de los inversores. Así, el Gobierno alemán se encontró ayer con problemas para poder colocar una emisión de notas con vencimiento en 2012. El objetivo era subastar 5.000 millones de euros, pero la falta de interés de los compradores redujo el importe final a 4.000 millones. Esta es ya la tercera subasta consecutiva en la que Alemania se encuentra por problemas para colocar la deuda.

La rentabilidad del bono, que sube en términos porcentuales en proporción a la caída del precio del activo, ha pasado en el bund alemán de los mínimos del 2,116% en agosto a situarse ahora por encima del 3%, el nivel previo a la crisis fiscal griega. El diferencial o prima de riesgo entre España y Alemania se mantuvo estable en el entorno de los 222 puntos básicos (2,22 puntos porcentuales) en el bono a 10 años.