El balón de oxígeno para Grecia permite al Ibex firmar su mejor día desde marzo

A comienzos de mayo, un año después de que la UE y el FMI decidieran rescatar a Grecia, la incapacidad de Atenas de hacer frente al pago de su deuda se hizo más evidente que nunca y no faltaron las voces que apostaron por -esta vez sí- dejar caer al país. Los rumores corrieron como la pólvora, reavivando las tensiones en el mercado soberano europeo e incendiando los grandes parqués, que han cerrado el mes con cuantiosas pérdidas. Ante la debacle, el Eurogrupo ejerció de bombero ayer dejando entrever que habrá un nuevo tramo de ayudas para Grecia. La noticia permitió al Ibex ganar un 2,13% en su mejor sesión desde finales de marzo.

El selectivo cerró la jornada en los 10.476 puntos, cota que perdió a comienzos de mes para caer hasta los 10.082 puntos. El alza de ayer, apuntalada por los valores financieros, se produjo en paralelo a la rebaja del perfil de riesgo soberano de la periferia europea. La calma estuvo propiciado por el anuncio, desde Bruselas, de que los secretarios de Estado de Finanzas de la UE se reúnen hoy en Viena para tratar la crisis helena. Su intención es avanzar hacia un acuerdo que contenga las caídas hasta el 20 de junio, cuando los ministros del ramo deben decidir si lanzan un nuevo salvavidas a Grecia. El desembolso oscilaría entre los 30.000 y los 60.000 millones de euros, cantidad que se sumaría a los 110.000 millones del último rescate. Cifras que Alemania estaría dispuesta a firmar si se aplazan las aportaciones de la banca, según publicó The Wall Street Journal.

"Los mercados se muestran optimistas y quieren descontar que los problemas de Grecia se resolverán con un nuevo plan de ayudas a cambio de un esquema de privatizaciones, sin ningún tipo de reestructuración" de la deuda, expone Daniel Pingarrón, estratega de IG Markets. Así, el diferencial del bono español a 10 años frente al alemán, de referencia, se redujo de los 240 puntos básicos del día anterior a 234. Por su parte, la prima de riesgo griega cayó hasta los 1.305 puntos, cuando a mediados de mes marcó su máximo histórico en los 1.401.

Este balón de oxígeno se tradujo en alzas para las grandes plazas bursátiles de Europa. Atenas ganó un 5,58%, Londres, un 0,86%, París, un 1,63% y Fráncfort, un 1,86%. Un buen resultado que no pudo redimir, sin embargo, el castigo sufrido durante el último mes. Mayo concluye con una caída del 8,73% para el Athex, del 1,32% en el FTSE, del 2,43% en el Cac y del 2,94% en el Dax.

Las pérdidas no han sido menores para el Ibex, que se ha dejado un 3,70% en mayo, su peor mes del año. Solo siete de las 35 valores del selectivo han cerrado el mes en positivo, con Grifols (6,10%) e Inditex (4,34%) a la cabeza, y Mediaset (-16,44%) y Sacyr (-12,11%) a la cola.

Mayo tampoco ha sido positivo para Wall Street que, si bien registraba alzas ayer, ha visto ceder un 1,35% al Standard & Poor's, un 1,88% al Dow Jones, y un 1,33% al Nasdaq.