El Ibex vive el segundo peor enero de su historia tras caer el 8,3%

Cuando todavía no se había echado el cierre a 2009, los expertos ya lo anunciaban: 2010 iba ser un año complicado para los mercados y así está siendo. El primer mes del ejercicio se ha saldado con una caída del 8,3% convirtiéndose en el segundo peor comienzo de año de la historia del Ibex. El entusiasmo con el que los inversores estrenaron el nuevo ejercicio pronto quedó enturbiado por distintas noticias macroeconómicas que han servido a los inversores como excusa para recoger beneficios.

El resto de Europa tampoco ha estrenado 2010 con buen pie aunque los recortes que ha sufrido no han sido tan abultado como el registrado por el Ibex. El Ftse de Londres ha cedido un 4% mientras que el Cac de París y el Dax de Francfort han encajado descensos del 5% y del 5,75%, respectivamente.

Las medidas anunciadas por el Banco Central de China para drenar la liquidez hizo saltar los temores sobre un frenazo en el crecimiento de la segunda economía mundial. Además, las dudas sobre la deuda soberana de Grecia siguen planeando sobre los mercados. Por si los mercados no tuvieran suficiente con tener que digerir estas dos noticias, las medidas anunciadas por el Gobierno Obama sobre el sector bancario para poder limitar su tamaño y sus actividades cayó como un jarro de agua fría sobre los mercados a pesar de que faltan por concretar los detalles de las mismas.

"Claramente, los mercados estaban fuertemente sobrecomprados. Una corrección se antojaba previsible", explican Daniel Pingarrón, analista de IG Markets. El experto añade que "aún es pronto para establecer si se tratará de una toma de oxígeno, para seguir retomando las subidas (como ocurrió en julio y en octubre del 2009), o si esta vez sí que nos enfrentamos a una corrección cercana al 25%", añade. Sin embargo, el experto cree que se trata de una simple toma de oxígeno teniendo en cuenta que las razones que han llevado a los mercados a corregir no son "estructurales o fundamentales, sino más bien políticas y de sentimiento".

En este mes no todo han sido noticias negativas. La parte micro ha dado más alegría a los inversores que la macro. La temporada de presentación de resultados del cuarto trimestre transcurre en los mismos términos que las tres anteriores. De las compañías del S&P500 que ya han presentado resultados, el 80% son por encima de las previsiones del mercado. Entre ellos, destacaron los de Google que han vuelto a batir las previsiones de los expertos , demostrando que además de ser prácticamente inmune a las recesiones económicas sabe sacar provecho de la incipiente recuperación del consumo. Anoche mismo, se publicaron los de Microsoft, en línea con las previsiones.

En España, a falta de Santander, han sido únicamente los bancos los que han publicado sus cuentas de 2009 y no todos han sido bien recibidos por los inversores. BBVA, uno de los últimos en presentarlas, ha visto como su cotización se resentía por culpa de las provisiones. Las acciones de la entidad financiera han cerrado el mes con un descenso del 12,8%. A la reacción sobre las resultados se ha sumado el temor que Europa pueda seguir el ejemplo de EE UU en cuánto a las nuevas medidas sobre la banca.

Por ello, las acciones de Santander también han cerrado enero con caídas de alrededor de dos dígitos. Por su parte, Bankinter y Sabadell han retrocedido respectivos 9,5% y 0,4%. Popular ha logrado escapar de la quema que ha sufrido el sector al revalorizarse un 7,6%. Entre los más alcistas del mes, se ha colado Iberia. La aerolínea ha subido un 16% y es una de las compañías favoritas en Europa para Credit Suisse. Los analistas esperan que la mejora del entorno económico impulse el negocio del sector

Inditex ha sido otra de las estrellas de enero. Los excelentes resultados publicados en los últimos días por su rival H&M han tenido un efecto beneficioso en la cotización del grupo gallego que gana desde enero un 5,1%.

En el mercado de divisas, el euro está en los niveles más bajos de los últimos cuatro meses al cotizar por debajo de los 1,4 dólares.