La Bolsa bate otro récord y acumula ya una revalorización anual del 33%

Los augurios de los que creían en el rally de fin de año se cumplieron ayer. El Ibex 35 conquistó un nuevo máximo y cerró por primera vez en su historia por encima de los 14.300 puntos, en los 14.327,50, tras un alza del 0,9%. El mercado se sacudió así la incertidumbre que había sembrado la víspera la reunión de Reserva Federal y se apoyó un día más en Telefónica, que ganó el 1,43%, al tiempo que contó con dos aliados inesperados: unos resultados de Inditex mejores a lo previsto, y que impulsaron la cotización de la compañía el 5%, y un buen dato de ventas minoristas en Estados Unidos. Todo ello con un notable volumen de negocio, que ascendió en total a 6.584 millones de euros (4.148 millones sin contar con las operaciones especiales).

Las ventas minoristas de Estados Unidos crecieron en noviembre el 1%, muy por encima del 0,2% previsto, lo que refuerza la tesis de que la desaceleración del mercado inmobiliario de Estados Unidos no está dañando el consumo del país, con el consiguiente efecto benéfico para el crecimiento económico. Así, la publicación de este dato sirvió para animar la cotización del dólar, que se apreció el 0,6% frente al euro, y para extender las alzas en el conjunto de las Bolsas mundiales. Por lo pronto, aproximó al Dow Jones a máximos históricos y fortaleció los avances del conjunto de mercados europeos, en la cota más alta de los últimos seis años. El Cac 40 ganó el 0,9%, el Dax alemán, el 0,7% y el Footsie londinense, el 0,6%, mientras que Wall Street, una vez encajada la alegría de las novedades macroeconómicas, moderó su marcha y finalizó con un leve ascenso del 0,02% para el Dow Jones.

Además del buen dato de ventas minoristas en Estados Unidos, los movimientos corporativos también tuvieron mucho que ver en el ánimo alcista de los mercados. En esta ocasión, el turno fue para las compañías aéreas y la noticia de las conversaciones preliminares para una fusión entre las estadounidenses United y Continental Airlines, que crearían la mayor aerolínea del mundo.

El mercado contó ayer por tanto con los dos elementos fundamentales que han hecho posible los avances de los últimos meses: las operaciones corporativas y la creencia de que la desaceleración económica que lidera EE UU va a ser gradual.

Bajo estas coordenadas, el Ibex tuvo dos aliados locales imprescindibles. La subida del 1,43% de Telefónica fue la que más contribuyó a apuntalar el nuevo máximo histórico, con una aportación de 31,2 puntos de los 127,30 que avanzó el selectivo. Inditex, que también cerró en máximos, hizo la segunda mayor aportación al Ibex gracias a un alza del 5%, seguida del alza del 2,8% de Acerinox y del 2,61% de Abertis, en respuesta a la paralización de su fusión con Autostrade. Pero no todos los valores se apuntaron al festival alcista y seis cerraron el rojo, entre ellos Prisa, que cedió el 1% tras la salida del Ibex.