El pago con tarjetas a crédito aplazado se reduce un 36%
Sólo el 14,1% de los usuarios de tarjeta de crédito se decantó por el pago aplazado con intereses durante este año, frente al 22,1% que empleó esta forma de pago en el ejercicio precedente, es decir, un 36% menos, lo que devuelve el uso de esta modalidad a niveles de 2006, según el 'Barómetro anual de las tarjetas en España 2001' presentado por MasterCard.
Con la crisis, la mayoría de quienes cuentan con tarjetas de crédito se autoimponen el pago íntegro a final de mes (80%) como medida para contener el gasto familiar, según explicó en rueda de prensa la directora general de MasterCard para España y Portugal, Pilar Aurrecoechea.
Pero además del mayor control de los usuarios de este tipo de ''dinero de plástico'', la restricción del crédito extendida entre las entidades financieras lleva a una reducción en la penetración de las tarjetas de crédito, pues sólo uno de cada cuatro españoles dispone de esta modalidad de pago. "Con la crisis cada vez hay menos tarjetas de crédito", constató el director de la compañía encargada de elaborar el estudio Inmark Estudios, Manuel López.
Es más, las tarjetas de crédito fueron utilizadas por un 24% de la población durante este ejercicio, uso que retrocede a niveles de 2003, cuando un 21,7% de los españoles tenía acceso a este tipo de dinero. Y sólo un 14% se plantea recurrir a esta modalidad de pago para compras superiores a los 300 euros, frente al 40% que prefiere el efectivo.
Mientras, el uso de tarjetas de débito se mantuvo estable, con dos de cada tres personas como usuarios, que fundamentalmente las utilizan para realizar compras en comercios (77,2%), lo que significa un aumento del 6,9%. También los titulares de tarjetas de crédito que prefieren pagar con ''dinero de plástico'' al efectivo ascendió este año, del 81,8% de 2010 al 84,8% actual.
Así pues, sólo el 17% del consumo privado en España se realiza a través del pago electrónico, muy lejos del cerca del 30% que representa en la UE y aún más del 44% en Reino Unido, según preció Aurrecoechea. "Hay que luchar contra el efectivo", defendió la directora general de MasterCard para España y Portugal.
Y para ello Aurrecoechea esgrimió que una mayor utilización del ''dinero de plástico'' puede relanzar el PIB europeo en torno a un 0,3%, lo que impulsaría la creación de empleo en un 2%.
El gasto medio de las tarjetas de crédito pasó de los 236 euros del año anterior a los 338 euros actuales, un 42% más. El perfil: varón de entre 18 y 34 años con ingresos superiores a 1.500 euros al mes para las tarjetas de débito, y varón de entre 35 y 54 años con ingresos de más de 1.500 euros al mes para las de crédito.
Por último, el pago con tarjeta se consolida como principal medio para realizar compras en Internet, ya que siete de cada diez personas se decanta por esta opción.