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Fernando Savater. Filósofo y ensayista

"La utopía es la pesadilla de muchos"

Impartirá una conferencia (La educación ética, ayer y hoy) en los cursos de verano de la Universidad Complutense de Madrid

Afirma rotundo que la utopía es algo nefasto. "Es el sueño de unos pocos que se convierte en la pesadilla de muchos". Lo que sí cree es que hay que defender los ideales en la educación de la ética. Considera que el gran avance del siglo XXI sería lograr unas instituciones internacionales con capacidad para mantener unos valores cívicos en todo el mundo, y resta trascendencia al reciente fenómeno del 15-M y su influencia en las pasadas elecciones municipales y autonómicas. Donostiarra del 47, participará en los cursos de verano de la Universidad Complutense de Madrid, en la que pronunciará la conferencia La educación ética, ayer y hoy, el 13 de julio, y en un coloquio sobre el tema junto a Aurelio Arteta, Ricardo Moreno Castillo y Salvador Vallés.

¿Qué cambios se han producido en la educación de la ética en lo que llevamos de siglo XXI y qué retos tenemos por delante?

Ríe. No tengo una bola de cristal para saberlos. La ética admite pocas modificaciones; es la estética la que cambia mucho. Lo que cambia es la forma de educar a la hora de transmitir los valores. Creo que en nuestra época hay más preocupación por la educación en valores, y hoy los valores apuntan más a la ciudadanía, a que sean valores cívicos. Lo que se llama educación para la ciudadanía es lo más importante que hoy se ha modificado en ese campo.

¿Ha seguido las protestas del 15-M? ¿Qué opinión le merece este movimiento?

Siempre está bien que la gente se movilice y se reúna para discutir modificaciones, pero de momento hemos oído de todo. Cosas interesantes, pero que ya se habían dicho muchas veces, como que hay que cambiar la ley electoral, pero también disparates, como que hay que abolir la ley de partidos o la ley Sinde. En fin, una mezcla de cosas sensatas que no son nuevas y de cosas nuevas que no son sensatas.

¿Cree que estamos ante lo que podría llegar a ser el germen de un cambio profundo de nuestro sistema democrático actual?

No, absolutamente nada. Dentro de cuatro días todo el mundo se habrá olvidado de ello, menos los que verdaderamente están preocupados, los que están en paro, los que tienen problemas para encontrar trabajo. Esos van a seguir preocupados y luchando porque tienen unos motivos muy concretos. Lo otro, la retórica, el lanzar brindis al sol, se acabará en cuanto llegue el verano y la gente se vaya a la playa.

¿Cómo valora el papel que están jugando las redes sociales en los movimientos que se están viviendo tanto en el sur del Mediterráneo como en el 15-M en España?

Todo lo que agilice la comunicación humana hace que todo vaya más rápido, ya sea para difundir conocimientos o para difundir consignas siniestras. Son un instrumento, no tienen moral. Y hay veces que se emplean para bien, como por ejemplo en las manifestaciones del norte de África, que son movimientos de lucha contra dictaduras, pero no creo que hayan causado la revuelta, aunque les hayan venido muy bien a los que protestan.

¿Hay que seguir apostando por la utopía?

No, no. La utopía es el sueño de unos pocos que se convierte en pesadilla de muchos. Lo que sí creo es que hay que defender los ideales en la educación, en la ética. Los ideales son importantes, pero la utopía me parece algo nefasto.

¿Cuál sería el gran logro desde el punto de vista ético del siglo XXI?

El gran logro sería que fuéramos capaces de alcanzar unas instituciones internacionales únicas, con tribunales de justicia y que garantizaran la educación para todos, no como las que tenemos ahora; que pudieran mantener valores cívicos en todo el mundo.

"Juzgar a Bin Laden hubiera sido ingenuo"

En las últimas semanas el operativo puesto en marcha por EE UU para matar al líder de Al Qaeda, Bin Laden, y el escándalo por un presunto delito de agresión sexual cometido por el ya ex director general del FMI, Dominique Strauss-Khan, han planteado división de opiniones desde el punto de vista ético en medio mundo.

¿Qué opinión le merece el operativo estadounidense para matar a Bin Laden? ¿Había otras alternativas?Es una acción de guerra. Bin Laden no era un particular, sino el líder de una organización con forma de ejército. Forma parte de lo que es la guerra, que no es nada edificante ni nada bueno, pero ahí está. Esa idea de que era un señor al que se le podía llevar a la cárcel y juzgarle como si hubiera sido un carterista es una ingenuidad.¿El caso de DSK cree que obligará a partir de ahora a los líderes a mantener una mayor transparencia y coherencia entre la ética pública y la privada?Hoy todo es online y eso transforma nuestro conocimiento de las cosas. La moral es cómo los seres humanos reaccionan ante lo que saben, que no depende de que sepan mucho o poco, sino de cuál es su actitud, de cómo se sitúan ante ello, y eso me temo que no se ha transformado tanto como quisiéramos.

Violencia. "Es útil, por eso hay que prohibirla"

Fernando Savater observa avances en la erradicación de la violencia en el País Vasco, pero cree que la intimidación se mantiene sobre los no nacionalistas y que hay que mantenerse vigilantes ante la irrupción de Bildu en las instituciones.

¿Podría valorar la situación que se está viviendo en el País Vasco, en los meses sin violencia mortal? ¿Ve avances?Así es, se ha renunciado a la violencia explícita mortal como usted dice, y eso ya es un avance, pero todavía existe un grave nivel de intimidación de la población. El miedo todavía influye en la población, que no se manifiesta libremente. Los no nacionalistas siguen presionados dentro del País Vasco.

¿Qué opina de la decisión del Constitucional de permitir la participación de Bildu en las elecciones?Algunos pensamos que antes tenían que haber hecho un reconocimiento más explícito de condena a la violencia. Pero después de la decisión del Tribunal, lo que hay que hacer es estar vigilantes para rechazar o cortocircuitar los intentos de rebrotar la violencia que pueda haber.Está trabajando en un nuevo libro sobre las distintas manifestaciones de la violencia: en la escuela, de género, en el deporte... ¿Tiene un tronco común independientemente sobre quién se ejerza?Sí, hay algo común porque está muy enraizada en nuestra propia condición. La violencia es una forma de atajar la resolución de los problemas, es una voluntad de someter al otro. Lo que no es cierto es lo que a veces se dice de que la violencia es inútil. No, la violencia es utilísima y por eso hay que prohibirla. Si no, recurriríamos a ella a troche y moche.

¿Qué deben hacer los medios para evitar que se entienda como un fenómeno natural?Pues contar las cosas como son, sin truculencias y no dando por sentado que tenemos que soportarla.

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