El tráfico aéreo con Latinoamérica cae un 11% lastrado por Chile, Ecuador y Venezuela
El tráfico aéreo entre España y Latinoamérica se ha reducido un 11% y ha sufrido la suspensión de ocho rutas en los últimos seis meses. El frenazo de la movilidad étnica (especialmente con Ecuador) y la modificación de los hábitos de los viajes de negocio ponen en jaque el santuario en el que se ha hecho fuerte la aviación española.
El tráfico aéreo entre España y Latinoamérica se resiente durante los últimos seis meses fuertemente golpeado por la crisis. Las rutas estrella de largo radio en las que durante los últimos 15 años se han hecho fuertes los principales aeropuertos y aerolíneas españolas han sufrido un recorte del 11% lastradas por la reducción en la ocupación de los aviones y por la eliminación de ocho rutas.
La cuantificación de la evolución de los tráficos entre España y Latinoamérica se basa en las estimaciones que realizan las compañías aéreas que operan en la zona, las patronales del sector y diversas agencias de viaje especializadas. Todas ellas manejan datos de IATA.
El quebranto no afecta a todos los destinos por igual. Existen algunos trayectos en los que incluso se mantiene el crecimiento del tráfico con cifras de dos dígitos que recuerdan al comportamiento que ha tenido este mercado hasta la primera mitad del pasado ejercicio. Tal es el caso de Colombia, Bolivia y Paraguay.
Los vuelos con Estados Unidos han sufrido también un retroceso estimado en el 6% de la demanda
El caso de Colombia es el más significativo y su crecimiento se fundamenta en la agresiva política de promociones que realizan las tres aerolíneas que cubren este mercado: Avianca, Iberia y Air Comet. Los crecimientos de Bolivia y Paraguay están en relación con la mejora que han experimentado las conexiones aéreas en los últimos meses.
Las noticias positivas, sin embargo, son la excepción, mientras que los tráficos en declive resultan la norma. Las rutas que han tenido un peor comportamiento son las que unen España con Chile, Venezuela, Santo Domingo y Ecuador.
El caso más significativo es el de este último país, Ecuador, cuya colonia en España es de las más numerosas y con un poder adquisitivo limitado. Fuentes de esta comunidad han asegurado que la crisis ha reducido de manera drástica los viajes de vuelta a casa.
Los descensos experimentados en Chile, Venezuela y Santo Domingo están relacionados con la eliminación de los vuelos que tenían las aerolíneas Santa Bárbara y Air Comet.
Otras compañías que han eliminado rutas en esa misma zona son China Eastern (unía São Paulo, Madrid y Pekín), Varig y Air Europa (que han dejado de volar a Río de Janeiro) y Pluna (que ha abandonado su salto desde Montevideo).
El deterioro de los tráficos también afecta a los vuelos entre España y Estados Unidos y a las conexiones con Canadá. Para la zona se estima una caída del 6%. Iberia realizó un fuerte recorte de capacidad del 15% en este mercado durante el mes de noviembre, para adaptarse a la demanda de la temporada de invierno y en los meses de diciembre y de enero se ha estabilizado en ajustes de tráfico en el entorno del 7%.
El descenso del tráfico entre España y América es significativo y está en línea con el que sufren otros mercados internacionales. IATA ha estimado en los últimos seis meses un descenso del 10% en las rutas entre Europa y Asia, que se eleva al 25% para el segmento específico de los pasajeros de negocio.
15 millones de pasajeros desde Europa
El plan director de Iberia para el trienio de 2009 a 2011 estima que el mercado entre Europa y América Latina se situó en 2008 en 15,5 millones de pasajeros. La previsión es que durante el presente ejercicio de 2009 exista una contracción hasta 15,1 millones de viajeros. Para el año 2011 la compañía aérea vaticina de nuevo el crecimiento y sitúa el número total de pasajeros en 16,1 millones.
Compra de último minuto
El comportamiento de los pasajeros entre España y Latinoamérica ha cambiado como consecuencia de la crisis, según explica Carlos Hernández, fundador de la agencia de viajes Vuelos OK. El descenso de la demanda ha disparado las ofertas. Se encuentran billetes de ida y vuelta por 520 euros a destinos con vuelos cuya duración es menor de 10 horas, aunque la tarifa media se eleva a 800 euros.Los pasajeros, emigrantes incluidos, ya no programan sus viajes con meses de antelación. Ahora saben que pueden encontrar ofertas interesantes incluso hasta en el último momento.Hernández dice que en las últimas semanas se ha reducido la compra de billetes de ida sin vuelta. Por otra parte, una encuesta realizada por la institución Portal Latino advierte de que la crisis afecta ya al 38% de los negocios que los emigrantes tienen abiertos en Madrid. Una de las actividades más perjudicadas es precisamente la de las agencias de viajes especializadas en vuelos de retorno. Ahora se ha disparado la compra en internet.
