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Aeronáutica

Los países impulsores del A-400M aplazan un mes la decisión sobre el avión

Los países promotores del A-400M, el avión de transporte militar de EADS y Airbus, han dado un poco más de aire al proyecto. Ayer, los ministros de Defensa de los siete países, entre los que se incluye España, acordaron concederse un mes más de plazo, hasta finales de julio, para decidir cuál es el futuro del avión, que ya acumula un retraso de entre tres y cuatro años respecto al calendario original.

El contrato con el que se lanzó el programa preveía que el primer vuelo se realizara entre el 31 de enero de 2008 y el pasado 31 de marzo. En la actualidad, no hay una fecha fijada para ese primer vuelo aunque los responsables de la empresa hablan de final de año como un horizonte probable. Una vez que se realice este vuelo, Francia, cliente inicial del aparato, recibirá su primer A-400M tres años después.

Los países promotores del avión (España, Francia, Alemania, Reino Unido, Bélgica, Luxemburgo y Turquía) tenían derecho a cancelar el programa el pasado 1 de abril por el incumplimiento de plazos. Sin embargo, acordaron la moratoria que ahora han ampliado para estudiar las modificaciones que EADS ha propuesto sobre el contrato inicial (que ronda los 20.000 millones de euros por 192 aeronaves) tanto en lo referente a precio como a las características técnicas del avión.

Los países han aprovechado este tiempo para analizar la situación del programa con un equipo de expertos independientes. La conclusión principal es que el proyecto es viable si la empresa cumple "determinadas condiciones". "Los países y la empresa han identificado un nuevo marco comercial, técnico y de gestión en el que deben incluirse los nuevos términos y condiciones que se puedan pactar. Antes de iniciar una nueva fase de negociación todavía es necesario resolver algunas cuestiones previas", señalaron los ministros en un comunicado conjunto tras su encuentro de ayer.

Reequilibrio financiero del programa

El objetivo principal de EADS y de su filial Airbus en su negociación con los clientes del A-400M es el "reequilibrio financiero" del programa. Es decir, que deje de dar pérdidas y que, si no es rentable, al menos permita llegar a un punto de equilibrio. En este sentido, la empresa tiene claro que el apoyo económico de los gobiernos impulsores del proyecto es clave. De momento, el proyecto ha tenido un impacto negativo en las cuentas de EADS de 2.104 millones de euros entre 2007 y 2008. Las penalizaciones por la demora acumulada pueden suma 1.400 millones más.

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