El mundo de la empresa, la cultura y la política da su adiós a Isabel Polanco

Representantes de la Familia Real, del Gobierno y del mundo empresarial y de la cultura dieron ayer el último adiós a Isabel Polanco, hija del fundador del Grupo Prisa, Jesús de Polanco, y consejera delegada del Grupo Editorial Santillana. Isabel Polanco falleció el sábado, a los 51 años de edad, víctima de un cáncer contra el que había luchado durante los últimos tres años. Cientos de personas acudieron desde la tarde del sábado a la capilla ardiente, que se había instalado en la sede de la Fundación Santillana, junto al Casón del Buen Retiro de Madrid.

Si a lo largo de la tarde noche del sábado fueron continuas las visitas de miembros del Gobierno, la oposición y personas del mundo de la cultura, de la empresa, del espectáculo y de los medios de comunicación, en la mañana del domingo, poco antes del mediodía, acudieron a dar el pésame a los familiares de la consejera delegada de Santillana los príncipes de Asturias, Don Felipe y Doña Letizia. Estuvieron presentes también el ministro de Cultura en funciones, César Antonio Molina, y la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, que, junto al Alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, esperaron en la puerta de la Fundación la salida del féretro para su incineración en el cementerio de la Almudena.

Del mundo empresarial asistieron a dar el último adiós a la editora, entre otros, la presidente de Banesto, Ana Patricia Botín; el presidente del BBVA, Francisco González; el vicepresidente del Banco Santander, Matías Rodríguez Inciarte; el presidente de Telefónica, César Alierta; el presidente de ACS, Florentino Pérez; el presidente de Ferrovial, Rafael del Pino; el presidente de Martinsa-Fadesa, Fernando Martin; el ex ministro Portavoz del Gobierno del PP y actual director general de Endesa, Pío Cabanillas; el abogado Antonio Garrigues, y el empresario y presidente del Patronato del Museo del Prado, Plácido Arango, entre otros.

Del ámbito político se acercaron hasta la capilla ardiente los ministros en funciones Alfredo Pérez Rubalcaba y Elena Salgado; el secretario de Organización del PSOE, José Blanco; la secretaria de Estado para Iberoamérica, Trinidad Jiménez; y el secretario de Estado de Telecomunicaciones, Francisco Ros.

También visitaron a los familiares, el ex presidente Felipe González, acompañado de su esposa, Carmen Romero, y el ex presidente de Endesa y diputado del PP, Manuel Pizarro, entre otros.

Además, acudieron directivos de los medios de comunicación como Juan Luis Cebrián, consejero delegado del grupo Prisa; Rodolfo Martín Villa, presidente de Sogecable; Blas Herrero, presidente del grupo Kiss; José Bergareche, vicepresidente del grupo Vocento, así como numerosos periodistas, entre ellos, Javier Moreno, director de El País; Iñaki Gabilondo, Carles Francino, Concha García-Campoy y Manuel Campo-Vidal, presidente de la Academia de Televisión.

Del mundo de la cultura dieron sus condolencias los escritores Javier Marías, José Saramago, Carlos Fuentes, Juan José Millás, Arturo Pérez Reverte, Manuel Rivas y Clara Sánchez, y el director de la Federación de Gremios de Editores de España, Antonio María de Ávila.

Trayectoria

Siete coches componían el cortejo fúnebre que, poco antes de las dos de la tarde, abandonó la sede de la Fundación Santillana con destino el cementerio de la Almudena. A la puerta del crematorio cientos de personas esperaban para acompañar a la familia, especialmente trabajadores de las empresas del grupo Prisa (editor de CincoDías) y amigos de la editora y su familia.

Isabel Polanco nació en Madrid en el año 1956 y se licenció en Psicología y Ciencias de la Educación por la Universidad Complutense de Madrid. Terminada la carrera, entró a trabajar en la empresa familiar, Santillana, como editora primero, y directora editorial después. Posteriormente se incorporó al Grupo Prisa, en el que desempeñó el puesto de directora de Recursos Humanos, para regresar más tarde a Santillana en calidad de directora general. Fue nombrada consejera delegada de la empresa en el año 2000, coincidiendo con la integración de la misma en Prisa. También era consejera del grupo de comunicación.

Al frente de Santillana, Isabel Polanco desarrolló una intensa actividad, potenciando todas las líneas de negocio y expandiendo las operaciones en ediciones generales (Alfaguara, Taurus y Aguilar). La creación del Premio Alfaguara de Novela, el de mayor prestigio en América Latina, figura entre sus aportaciones. En el terreno empresarial, implantó Santillana en Brasil, con la compra en 2001 de la Editorial Moderna, que ha experimentado un formidable crecimiento. Isabel Polanco imprimió gran dinamismo a las actividades editoriales de Prisa llevando muy personalmente las relaciones con los autores del grupo. Viajera incansable a través de toda Latinoamérica, era muy apreciada y conocida en los círculos intelectuales hispanos. Estaba casada con Alfonso López Casas, secretario general de Unión Radio, el grupo radiofónico de Prisa, y tenía tres hijas y un hijo.