La inversión en redes y equipos de 'telecos' sufrió un desplome del 17% en 2008
El gasto en redes de telecos cayó un 17% en España en 2008. Afecta la crisis, pero aún más la política de ajuste de las operadoras. En 1999 invirtieron uno de cada cuatro euros ingresados; en 2008 sólo 25 céntimos. El sector avisa de que se pone en riesgo la sociedad de la información.
Los principales fabricantes de equipos de telecos con presencia en el mercado español -Ericsson, Nokia-Siemens, Alcatel-Lucent, Amper y Cisco- dan la voz de alarma sobre la acusada caída de la inversión que realizan en sus redes los operadores.
Según datos de Aetic, la patronal del sector, en el ejercicio de 2008 el gasto que dedicaron a la extensión, modernización y mantenimiento de las infraestructuras de señales y de los equipos que soportan los servicios asociados cayó un 17%. Como consecuencia de ello la producción nacional de este tipo de productos de alta tecnología se desplomó un 12%.
Fuentes del sector aseguran que este descenso se ha agravado como consecuencia de la crisis económica, pero viene produciéndose de manera sostenida desde los años 1999 y 2000 en los que se consiguieron cifras récord en despliegue de redes.
Según los datos de Aetic, en 1999 el conjunto de los operadores españoles consiguieron una cifra de negocios de 17.548 millones de euros y su inversión en redes y servicios (excluidos terminales) se elevó 4.333 millones. De ambos datos se deduce que, de cada cuatro euros ingresados, las compañías gastaron uno en la modernización de sus infraestructuras; esto es, cerca del 25% de su facturación.
Este ratio ha evolucionado de manera drástica desde entonces hasta 2008. La facturación del conjunto de las compañías de servicios de telecos creció hasta 44.690 millones, mientras que la inversión en redes y servicios se desplomaba hasta 2.989 millones. De ello se deduce que de cada cuatro euros ingresados ahora sólo se invierten 25 céntimos. En términos porcentuales, el gasto es tan sólo el 6,69% de la cifra de negocios conjunta.
Las fuentes mencionadas aseguran que solamente financiar el mantenimiento de las redes desplegadas exige una inversión equivalente al 5% de la facturación de las compañías. Por esta razón advierten que con las actuales cifras de gasto es imposible acometer nuevos despliegues y adoptar nuevas tecnologías y servicios. Apenas hay presupuesto para conservar operativa la planta previamente instalada.
El sector de fabricación denuncia que la drástica caída de la inversión en infraestructuras de telecomunicaciones es consecuencia de la política de ajuste de gastos que desde hace ocho años mantienen las operadoras "con el objetivo de cuidar sus cuentas de resultados". Al aplicarse a la inversión en red, se ha traducido en una política de compras basada en "agresivas subastas, que condenan a los fabricantes a una crisis permanente ya que deben a ofrecer sus productos a precios decrecientes, si quieren permanecer en el mercado".
Los fabricantes aseguran que esta política "conduce inevitablemente a la quiebra del desarrollo de la sociedad de la información en España, ya que no deja margen para invertir en infraestructuras de nueva generación en un momento en el que los despliegues de banda ancha son una prioridad".
El fenómeno no es exclusivo de España, según el sector, pero la presencia de tres de los operadores de mayor relevancia mundial en el mercado nacional, hacen que las consecuencias de esta política "sean aquí más acusadas".
De las mesas de compras a las subastas agresivas
La aplicación de la política de ahorro en los costes de infraestructuras de red que aplican los operadores se ha traducido en la aparición de un nuevo sistema de compras agresivo basado en el modalidad de subasta. Antes se plantearon las mesas de contratación a las que se invitaban a dos o tres suministradores con el objetivo de adjudicar contratos medianos o grandes, en competencia entre ellos. La nueva modalidad consiste en convocar de manera mucho más habitual subastas cuyo fin es adquirir cantidades medias o incluso pequeñas de equipos. En ellas participan todos los fabricantes que lo deseen aplicándose en un sistema de puja con precios a la baja.
Récord
El año 2000 marcó el récord de inversión de las operadoras españolas en sus redes con 5.381 millones. Poniendo esta cifra en relación con su facturación se deduce que gastaron en infraestructura el 24,13% de los 22.301 millones que ingresaron.