BBVA, BSCH y Caja Madrid pierden 1,6 puntos de cuota de depósitos en seis meses

En conjunto, los depósitos de la gran banca (sólo matrices) sumaban al terminar el semestre 41,27 billones de pesetas, el 46,79% del total (88,16 billones). Al acabar 2000, ascendían a 39,5 billones, el 47,9% sobre un total de 82,28 billones de pesetas. Eso significa que los cinco grandes han perdido más de un punto de cuota en sólo seis meses.

Sólo La Caixa y el Banco Popular consiguieron en este tiempo aumentar el peso que representan los depósitos tradicionales sobre los captados por el total de bancos y cajas. BSCH, BBVA y Caja Madrid, cedieron 1,6 puntos de cuota de mercado.

Y es que, salvo las dos excepciones mencionadas, las otras tres entidades registran aumentos muy inferiores a la media del sector de diciembre a junio (1,8% de Caja Madrid, 2,15% del BBVA y 3% del BSCH, frente al 11,6% del Popular y 10,77% de La Caixa).

BBVA y BSCH pierden negocio, tanto de crédito como de pasivo, prácticamente desde sus respectivas fusiones, resultado lógico del proceso de cierre de oficinas.

Además, hasta mediados de este año ambos grupos han desarrollado una política premeditada de anteponer la recuperación de los márgenes al crecimiento del negocio, con lo que han aflojado considerablemente la competencia en el sector. Bancos medianos y cajas de ahorros han sabido aprovechar esta menor presión para arañar mercado en un momento que, además, ha coincidido con su expansión comercial.

Eso explica que sean justamente La Caixa y el Banco Popular las dos entidades que más sucursales han abierto en los últimos meses y las que mayor cuota de mercado han ganado también en este semestre. El Popular, en concreto, ha inaugurado en este periodo nada menos que 68 oficinas y prevé abrir otras 78 en lo que resta de año.

Recuperar terreno

Aunque BBVA y BSCH mantienen la tónica de los últimos trimestres, pierden negocio tanto de crédito como de pasivo, ambos afrontan el último cuatrimestre con el objetivo de recuperar el terreno cedido. Sus responsables han trasladado ya a las plantillas la necesidad de volcarse en el negocio doméstico, aprovechar la mayor actividad y oportunidades que se presenta en estas fechas y explotar al máximo la red comercial. Con ello, cabe esperar una mayor presión competitiva en los próximos meses, en los que, además, habrá que lidiar con un escenario de ralentización económica y tipos a la baja.

El BBVA lo tiene algo más fácil, al haber dado por finalizada su reestructuración. De hecho, según los analistas, los datos del mes de julio del BBVA ya anuncian crecimientos del negocio por encima de la media registrada en el sector.

En el caso del BSCH, superada la crisis todavía queda alguna incógnita por despejar, aunque probablemente la entidad tratará de ajustar los cierres de oficinas previstos a las circunstancias del mercado para no dejarse arrebatar negocio.

Los buenos datos de morosidad y calidad del crédito en ambos casos les permitirá abrir un poco el grifo, después de varios meses en los que han venido haciendo alarde de prudencia ante el empeoramiento de la situación económica.

Caja Madrid

Resulta llamativo el caso de Caja Madrid, que sigue avanzando en el mercado del crédito, pero pierde peso en depósitos. De hecho, es la entidad con mayor crecimiento de la inversión crediticia de diciembre a junio (un 35%), pero pierde cuota en la captación de ahorro, de manera que en junio tenía más de 8,5 puntos del mercado de créditos, frente a sólo 6,29% del mercado de depósitos. En el primero gana una cuota de casi dos puntos en sólo seis meses y en el caso del ahorro pierde, en el mismo periodo, 0,3 puntos.

En general, las cajas de ahorros han apostado fuertemente por la expansión del crédito, lo que ha llevado al sector a arañar cada vez más cuota de mercado.

El sector controla en conjunto, actualmente, el 42,7% del total de créditos que se conceden en el sistema financiero. Hace una década, apenas sobrepasaba un porcentaje del 31%.