La banca trata de quitar hipotecas a sus rivales por vía telefónica
La agresividad comercial de la banca española sube varios enteros. La última tendencia es llamar por teléfono a clientes de entidades rivales para que cambien su hipoteca de banco. Desde comienzos de 2006, 50.000 personas ya han dado ese paso.
Son las diez de la noche y el teléfono del salón comienza sonar: 'Le llamamos de la filial de internet de Banesto. Queremos convencerle para que cancele su crédito hipotecario y lo traiga con nosotros', explica un solícito teleoperador al otro lado de la línea. Esta conversación, habitual en la batalla de la telefonía móvil, comienza a extenderse en el mundo financiero.
i-Banesto ha iniciado en los últimos meses varias rondas de llamadas telefónicas para proponer a clientes de otras entidades que cancelen su hipoteca y la cambien de banco. Las condiciones son tentadoras. Además de ofrecer un tipo de interés muy competitivo -del euribor +0,35%-, la división online de Banesto se compromete a hacerse cargo de todos los gastos que genere la subrogación del préstamo.
Desde la entidad se asegura que este tipo de acciones comerciales se hacen 'periódicamente' y que no se circunscriben únicamente a hipotecas. 'Los productos estrella en telemárketing el uso del canal telefónico para contactar con potenciales clientes son las tarjetas y los préstamos', explican fuentes oficiales.
Las siete subidas de tipos decretadas por el Banco Central Europeo, desde finales de 2005, han hecho que las entidades mejoren sus márgenes comerciales, lo que les ha permitido abaratar sus tarifas. Este factor, unido a la desaceleración del mercado inmobiliario, ha provocado que bancos y cajas se lancen a captar hipotecas a toda costa.
Desde comienzos de 2006 hasta ahora, más de 50.000 personas han cambiado de entidad su préstamo con garantía hipotecaria, según datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística. La cifra de subrogación en hipotecas aumentó un 50% en el pasado ejercicio, respecto a 2005.
Aunque el recurso al telemarketing aún no se ha generalizado, otros bancos online reconocen que captan hipotecas a través del teléfono.
ING, pese a no haber recurrido a métodos tan agresivos como Banesto, incluye en sus anuncios en televisión diversos guiños para que los potenciales clientes se lleven su hipoteca al banco naranja. De hecho, el 35% de los préstamos inmobiliarios que concedieron durante 2006 procedía de subrogaciones, explican en la entidad.
'Una de las dificultades a las que nos enfrentamos es que los clientes que provienen de otras entidades son mucho más exigentes', explica Almudena Román, directora de márketing de la Hipoteca Naranja, un producto de ING Direct que cuenta con un diferencial de euribor +0,33%.
Otras entidades, como Openbank o Uno-e -filiales online de Santander y BBVA, respectivamente-, aseguran no realizar campañas de este tipo, al tiempo que reconocen la proliferación de las hipotecas por la vía de la subrogación.
Las ventajas de 'dar el salto'
Aunque cambiar el préstamo hipotecario de entidad puede producir algún vértigo burocrático, las ventajas de dar el salto pueden ser notables. Por ejemplo, un cliente que tenga una hipoteca de 150.000 euros a 20 años y que pague un tipo de interés del euribor más 0,50%, en caso de cambiar el crédito a una entidad que le ofrezca el euribor más 0,33%, ahorraría 79 euros por cada año que le faltara para amortizar el crédito. En estos cálculos se incluyen el coste de cancelación del préstamo, 1.000 euros de gastos de subrogación y el 0,50% por la comisión de subrogación que suelen aplicar las entidades. Según los simuladores hipotecarios que ofrecen algunos bancos en sus páginas web, al cliente le compensaría cambiar de entidad que le ofreciera el euribor más 0,33%, aunque estuviera pagando un diferencial del 0,42%. En caso de que la nueva entidad costee parte de los gastos de subrogación, el cambio se volvería aún más atractivo.
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