La ausencia de extraordinarios lastra las cuentas de Endesa

Endesa logró un beneficio neto de 1.255 millones de euros en el primer semestre del año, un 28,53% menos que en el mismo periodo de 2006, debido a la práctica ausencia de extraordinarios, que en los primeros seis meses del año pasado sumaron 641 millones. Sin tener en cuenta los elementos no recurrentes, el beneficio creció un 11,9%.

El año pasado, Endesa contabilizó el reconocimiento de los sobrecostes de la generación extrapeninsular del periodo 2001-2005, que ascendió a 227 millones (más 31 millones de intereses), lo que tuvo un impacto de 197 millones en el beneficio neto. Además, sumó 148 millones por la aplicación de la legislación fiscal italiana al inmovilizado de Endesa Italia, con un impacto positivo de 118 millones. Los efectos fiscales de la fusión de Elesur con Chilectra (170 millones) tuvieron un efecto positivo de 101 millones. Además, la empresa acometió desinversiones con un efecto sobre el beneficio de 225 millones.

Frente a esta situación, los resultados del primer semestre de este año son recurrentes casi en su totalidad, ya que sólo incluyen 7 millones por factores extraordinarios.

En este contexto, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) de la compañía aumentó un 1,83%, hasta 3.831 millones, mientras que los ingresos se situaron en 10.373 millones, con un retroceso del 2,15%.

La producción de electricidad se redujo un 0,9%, hasta 92.403 gigavatios hora (GWh), mientras que las ventas crecieron un 3,5% y se situaron en 112.158 GWh.

Endesa invirtió 1.790 millones entre enero y junio, de los que 1.559 millones fueron inversiones materiales. Al término del primer semestre, la deuda de la compañía ascendía, a 20.312 millones, un 2,4% más que a principios de año. La empresa se contabilizó un déficit de tarifa de 214 millones.

Según la eléctrica, los resultados están en línea con los objetivos establecidos, pese a un entorno energético en España más complicado.