Anfac, disconforme con el acuerdo alcanzado en el convenio estatal del metal
La junta de Confemetal dio el 14 de diciembre el visto bueno al acuerdo de estructura de la negociación colectiva del convenio estatal del metal. Anfac, que agrupa a los fabricantes de automóviles en España, teme que la reforma merme la independencia de los convenios de empresa de sus plantas en materia salarial.
Los fabricantes de automóviles en España siempre han sido celosos de sus convenios de empresa, que rigen las relaciones con sus empleados. La flexibilidad para adaptar la producción a los vaivenes de la demanda es una prioridad para ellos, como lo es el control salarial, máxime cuando los costes de las plantas españolas son determinantes a la hora de recibir inversiones de sus matrices para nuevos modelos.
Fuentes de Anfac, que agrupa a las marcas propietarias de las 17 factorías existentes en España, han mostrado a este periódico su preocupación por el acuerdo alcanzado entre Confemetal (la patronal del metal) y las federaciones de Industria de CC OO y UGT para establecer el armazón competencial de un futuro convenio estatal del metal, inexistente hasta ahora. El acuerdo, que debe ser desarrollado todavía, fue ratificado el pasado martes por la junta de Confemetal, patronal a la que no pertenece Anfac como tal asociación, aunque algunas de las empresas del motor están afiliadas a título individual.
Sin embargo, todo el sector del automóvil se incluirá bajo el paraguas del nuevo convenio; de aquí la preocupación en Anfac. Fuentes de esta asociación critican la decisión de los negociantes de dar prioridad a los convenios provinciales sobre los de empresa, lo que, en opinión de la patronal del automóvil, va contra el espíritu de la reforma de la negociación colectiva aprobada el 11 de junio. Fuentes de Confemetal reconocen que el espíritu del convenio estatal es garantizar la supervivencia de los convenios provinciales, imprescindibles para una industria en la que predominan las pequeñas instalaciones. Pero declaran no entender la preocupación de Anfac, ya que se establece la cláusula de descuelgue de las compañías que en la actualidad tengan convenio de empresa. Carlos Romero, secretario de Acción Sindical de UGT, muestra su extrañeza por la posición de Anfac y reitera que en ningún caso las fábricas de automoción estarán supeditadas a los convenios provinciales.
El convenio estatal dará potestad a los provinciales para que estos determinen el grado de afectación de los convenios de empresa a lo regido por los provinciales en materia salarial. Y aquí está el temor de Anfac, que no quiere que un convenio provincial pueda establecer salarios mínimos para sus fábricas. Y aunque reconocen que sus convenios actualmente firmados quedarán excluidos, piensan en posibles futuras instalaciones que sí tendrán que someterse a lo pactado en los convenios provinciales.
Ante un conflicto, nada de mediación obligatoria
El otro resquemor que despierta en Anfac el acuerdo sobre el convenio estatal del metal no está plasmado en el documento de estructura de negociación colectiva alcanzado entre Confemetal y CC OO y UGT. Pero según fuentes de los fabricantes de automóviles, existe un compromiso verbal. La asociación teme que se establezca en el convenio del metal un procedimiento no judicial obligatorio de solución de conflictos derivados de la aplicación de un convenio.Sin embargo, fuentes de Confemetal y de UGT descartan que el sistema de mediación y arbitraje que pudiese establecerse tenga carácter obligatorio. Además, remarcan que existe una negociación que debe cerrarse antes de junio de 2012 entre CEOE y los sindicatos para establecer el sistema de solución de conflictos.