Telefónica apeló a los principales abogados para ganar la batalla por Vivo
Telefónica se rodeó de los primeros de la clase en la batalla desatada con Portugal Telecom por el control de la operadora brasileña Vivo. Como es tradicional, la compañía trabajó con Uría Menéndez para los temas relacionados con España, pero se apoyó en Cuatrecasas para asesorarse sobre las leyes portuguesas y recurrió a Machado Meyer en Brasil.
UBS y Credit Suisse fueron los bancos de inversión que asesoraron a Telefónica en la pugna para hacerse con el control de Vivo. Durante más de dos meses frenéticos, los expertos de estas firmas diseñaron estrategias, hicieron números y propusieron alternativas ante los movimientos del contrincante, Portugal Telecom, absolutamente reacio a soltar la pieza codiciada por Telefónica: su 29,7% de la operadora brasileña Vivo.
Pero estos dos bancos de inversión no fueron la única ayuda externa a la que apeló la operadora. La compañía presidida por César Alierta recurrió a los principales despachos de abogados para tener todos los frentes cubiertos. Ya se conocía la participación de Cuatrecasas Gonçalves Pereira, elegido por su conocimiento del mercado y las leyes portuguesas. A este nombre hay que añadir otros dos, el despacho español Uría Menéndez y el brasileño Machado Meyer.
Y es que Telefónica no quiso dejar ninguna posición descubierta. Por eso, contrató a Uría Menéndez como asesor nacional en materia de fusiones y adquisiciones, según afirma la publicación británica especializada The Lawyer y confirman fuentes del sector. La operadora trabaja habitualmente con el despacho madrileño, premiado en dos ocasiones como mejor firma española del año en los Chambers Europe Awards for Excellence.
Sin embargo, recurrió al conocimiento de Cuatrecasas Gonçalves Pereira para las materias relacionadas con las leyes portuguesas. El socio Manuel Castelo lideró el equipo que prestó asesoramiento jurídico en derecho luso, mientras que Emilio Cuatrecasas se centró en lo relacionado con la golden share usada por el Gobierno portugués para vetar la venta de Vivo a Telefónica.
Tampoco el frente brasileño quedó descubierto. Telefónica escogió en este caso a uno de los principales despachos del país latinoamericano, Machado Meyer, con el que también tiene una larga relación.
Portugal Telecom, mientras tanto, buscó a uno de los grandes españoles para la contienda y encontró asesoramiento en la delegación portuguesa de Garrigues. El Gobierno luso, por su parte, echó mano de Sérvulo & Asociados.
Investigación a Cesky
Las autoridades de defensa de la competencia de la República Checa han abierto una investigación a Cesky Telecom, la filial de Telefónica. El organismo está estudiando si Cesky abusó de su poder dominante en el mercado de banda ancha.
Alierta inicia el curso con una ronda por Latinoamérica
El presidente de Telefónica, César Alierta, ha dedicado los primeros días del arranque de curso a estrechar lazos al otro lado del Atlántico. Su primer destino fue Brasil, donde presentó al presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, la nueva estrategia de la compañía tras la toma de control de Vivo. Pero no ha sido el único.El primer ejecutivo de Telefónica también hizo una parada en Chile, donde se reunió con el presidente del país, Sebastián Piñera, para presentarle el plan de inversiones que tiene la compañía. Telefónica cuenta con un programa para extender una red de fibra en Chile con el que pretende invertir 2.500 millones de dólares -unos 1.940 millones de euros- hasta 2014. El objetivo es conectar 700.000 hogares en cuatro años. Unos 100.000 se harán en 2010.