Qualcomm bate su récord de ingresos por el impulso de los 'smartphones'
El avance de los smartphones ha consolidado el posicionamiento de Qualcomm, uno de los líderes globales en el ámbito de chips para móviles. La compañía batió su récord histórico de ingresos y beneficios durante su primer trimestre fiscal y prepara ahora su asalto a los nuevos negocios.
Así, Qualcomm registró unos ingresos de 3.350 millones de dólares (unos 2.440 millones de euros) en el último trimestre, cifra que supone un crecimiento del 25% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior y que bate las previsiones del mercado. De igual forma, la compañía elevó sus beneficios un 39%, hasta 1.170 millones de dólares, también por encima de las estimaciones de los analistas.
El anuncio de las cuentas provocó que las acciones de Qualcomm llegaran a subir más de un 4% en los mercados fuera de hora, y ya se sitúan en sus precios máximos de los últimos 11 años.
Paul Jacobs, consejero delegado de Qualcomm, apuntó al avance de las ventas de smartphones equipados con los chips snapdragon de la empresa como una de las claves de la mejora de las cuentas, destacando el crecimiento de la comercialización de estos dispositivos en países como EE UU, Japón y Corea del Sur.
El gigante estadounidense de los chips, que compite en el ámbito móvil con grupos como Nvidia, se ha hecho fuerte en terminales con el sistema operativo Android, que impulsa Google. Asimismo, Qualcomm aspira a ganar posiciones como suministrador del iPhone de Apple. La empresa podría ser uno de los proveedores de equipos del nuevo iPhone que va a lanzar Verizon Wireless en EE UU.
En este contexto, Qualcomm elevó sus previsiones para el ejercicio fiscal 2011. La empresa subió su estimación de beneficios por acción de 2,91 a 3,05 dólares, y situó su previsión de ingresos en los 14.200 millones de dólares, frente a una estimación anterior de 13.600 millones.
En el ámbito corporativo, la compañía señaló que espera cerrar la compra de Atheros Communications en el mes de junio. Una adquisición, valorada en 3.200 millones de dólares, con la que Qualcomm quiere convertirse en uno de los principales jugadores en el área de los smartphones y los tablets, y frenar el avance de Intel y AMD.