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Mastercard le gana el Mundial a Visa en el juzgado

La FIFA despide a los cuatro colaboradores que negociaron el cambio de patrocinio del campeonato

No es la primera vez que una pugna entre dos gigantes competidores directos acaba en los tribunales. Pero es que en esta ocasión está en juego el patrocinio del evento deportivo más visto del mundo: el Mundial de Fútbol. A Mastercard, patrocinadora oficial de la competición desde 1990, no le gustó nada ver cómo la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) optó por su gran rival, Visa Internacional, para el patrocinio de los dos mundiales de 2010 y 2014. Llevó el caso a juicio en mayo, acusando a la federación de negarle su derecho a igualar la oferta de su competidora. El tribunal de Nueva York, donde tiene su sede la empresa, acaba de darle la razón a Mastercard. Pese a su lema, la FIFA no jugó limpio en las negociaciones de los derechos con las empresas de medios de pago, según la decisión judicial de la semana pasada.

La pérdida del patrocinio de los mundiales de fútbol para Mastercard 'no tendría precio', indica la juez de distrito de Manhattan, Loretta Preska, haciendo referencia al popular eslogan que la empresa lleva usando desde 1997. Los negociadores 'engañaron' a Mastercard, según Preska. Le hicieron creer que tendría un periodo exclusivo de 90 días entre el 8 de febrero y el 8 de mayo de 2005 para considerar un acuerdo mientras que la FIFA negociaba 'simultáneamente y agresivamente' con Visa. El contrato de 180 millones de dólares de Visa por los derechos de los mundiales de 2010 y 2014, por lo tanto, no es válido.

La FIFA asumió parte de su culpa al anunciar este martes la terminación 'con efecto inmediato de su relación laboral' con Jerome Valcke, director de la división de mercadotecnia y televisión de la federación y tres colaboradores de la división, Tom Houseman, Robert Lampman y Stefan Schuster.

'En el proceso se acusó a los colaboradores de la FIFA (...) de reiterada falta de honradez en las negociaciones y de haber dado falsa información a los gremios de la FIFA que están facultados para tomar decisiones', indica la federación en un comunicado. A pesar de todo, considera la interposición de un recurso de apelación contra el fallo que, considera, 'favoreció únicamente a una de las partes, es decir, Mastercard'.

La otra gran damnificada, la competidora Visa, asegura que 'se sorprendió y quedó consternada' al conocer que la federación 'no había sido sincera' sobre sus obligaciones con Mastercard. 'Visa negoció y firmó un acuerdo de patrocinio con FIFA de buena fe', se defiende la compañía en un comunicado, quien también está considerando 'todas sus opciones' legales.

Mastercard, por su parte, celebra la victoria y, sobre todo, su posición de líder absoluto en el fútbol. La compañía comenzó su alianza con la FIFA como patrocinador del Mundial de Italia de 1990. Desde entonces ha patrocinado las cuatro mundiales siguientes y ha extendido su participación en el fútbol a otras competiciones, como la Copa Mundial del Fútbol Femenino, la Champions League, el Campeonato Europeo de la UEFA, la Copa América y la Copa Libertadores.

Visa, patrocinador de los Juegos Olímpicos desde 1986, quería entrar también en el lucrativo negocio del deporte rey. Algo comprensible dado el éxito de la máxima competición: el Mundial de Alemania de este verano generó una audiencia acumulada de más de 30.000 millones de personas en todas las partes del mundo. Mastercard asegura que hace dos años su presencia era limitada en Alemania. En marzo de 2006, a tres meses del torneo, había firmado acuerdos con más del 90% de los bancos en el país gracias, según la empresa, a su condición de patrocinador del Mundial.

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