Interior urge a los clientes de móvil a que registren sus datos

Quince millones de tarjetas prepago de móviles podrían quedar desactivadas si sus dueños no se identifican antes del 9 de noviembre. Así lo explicó ayer el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, en la presentación de la campaña 'Identifícate', realizada por este ministerio en cooperación con las operadoras de telefonía móvil.

La campaña trata de hacer un llamamiento a los dueños de las tarjetas para que acudan a los puntos de venta de las compañías con su DNI, pasaporte, tarjeta de residencia o de identificación fiscal, y eviten así perder su número de móvil. La medida 'no es un capricho, es una necesidad de las Fuerzas de Seguridad, porque es un mercado el de las tarjetas prepago en el que se mueven bien el crimen organizado y el terrorismo', dijo Pérez Rubalcaba. El ministro agradeció el esfuerzo de las operadoras que, además de tener que llevar un registro con la identidad de sus clientes de tarjetas, tienen la obligación de guardar durante dos años los datos de todas las llamadas realizadas desde sus terminales. Las operadoras calculan en 50 millones los costes derivados del cumplimiento de la ley de conservación de datos que entró en vigor en noviembre de 2007, y que obliga, entre otras cosas, a dicha identificación.

Pese al esfuerzo de la Administración y de las operadoras, durante la comparecencia del ministro quedó en evidencia que existen algunas lagunas en esta tarea de identificación: los delincuentes podrán comprar tarjetas prepago en países próximos donde no se aplica la medida, al menos por ahora, como Francia, Portugal o Marruecos. También se admitió la existencia de un mercado negro de tarjetas y la dificultad para que algunos colectivos como los ancianos o los inmigrantes registren sus datos personales.