Indra impulsa su expansión con Moranchel de vicepresidente

El grupo Indra comunicó el viernes que ha reorganizado su cúpula directiva para adaptarla "al intenso proceso de globalización y a los objetivos de futuro" que tiene previsto acometer a corto plazo. La empresa tecnológica ha designado a su actual consejero delegado, Regino Moranchel, como vicepresidente ejecutivo. El actual director general, Javier de Andrés, ocupará el puesto de consejero delegado de la compañía.

Desde la vicepresidencia ejecutiva de la compañía, Moranchel centrará sus actuaciones "en los próximos ejercicios, además de en la supervisión de los negocios y actividades más críticas para la empresa en cada momento, en la implantación de las actuaciones estratégicas necesarias para la plena globalización de Indra y el mejor aprovechamiento de sus oportunidades de crecimiento futuro", según comunicaron el viernes desde la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Moranchel desmintió este verano que tuviera intención de jubilarse o de desvincularse de la compañía.

Por su parte, el actual director general de la compañía, Javier de Andrés, ocupará el cargo de consejero delegado. Será propuesto "como consejero en la próxima junta general de accionistas de Indra, que previsiblemente será la junta ordinaria que tendrá lugar en el primer semestre de 2011, para su posterior designación en su nuevo cargo".

El consejo de administración ha decidido además "promover a director general a Carlos Suárez, actual director general adjunto responsable de las actividades de Defensa, quien se incorpora así a la alta dirección de la compañía y a su comité ejecutivo", dijeron.

A partir del próximo mes de enero de 2011, De Andrés compartirá con Moranchel las competencias y responsabilidades correspondientes a esta posición.

Reducción del beneficio

La tecnológica redujo su beneficio atribuido en los nueve primeros meses del año un 5% por los costes extraordinarios, hasta alcanzar un resultado de 143 millones. Las ventas se mantuvieron estables en 1.878 millones. El resultado de explotación antes de costes extraordinarios, sin embargo, cayó un 4%, hasta los 206 millones.

La cartera de pedidos se incrementó un 14%, hasta los 2.818 millones. El mercado internacional sube el 18%, frente al 2% de alza que experimentó el mercado nacional. Indra añadió que, a pesar del "complicado entorno", mantiene todos sus objetivos para este año: crecer como mínimo un 7% en contratación y aumentar un 2% las ventas. Asimismo, Indra espera aumentar las ventas un 2% con un "ligero" descenso en el mercado nacional.