General Motors cerrará Saab tras fracasar el segundo intento de venta

General Motors ha decidido no esperar más y retirar de los mercados a la mítica marca sueca Saab. La multinacional estadounidense anunció el viernes su decisión después de que fracasase el segundo intento de venta. En esta ocasión, el comprador arrepentido ha sido otro fabricante de bólidos, Spyker, una compañía holandesa que compitió en la Fórmula 1 entre 2006 y 2007. Según explicó el grupo de Detroit, la auditoría realizada a la marca sueca provocó "diferencias insalvables entre las partes". El primer interesado fue la sueca Koenigsegg.

El presidente de GM Europe, Nick Reilly, explicó que procederá a un cierre "ordenado del negocio" de Saab, "de una forma responsable", de manera que, una vez finalizado el pago de las deudas, se suspenderá por partes la producción y la distribución. La firma sueca da empleo a unas 3.400 personas en la planta localizada en la ciudad sueca de Trollhäatan, y cuenta con 1.100 concesionarios. Sus modelos se fabrican además en Graz (Austria) y EE UU. Su producción se elevó el año pasado a 90.280 unidades.

Herencia

El nombre Saab proviene de las siglas de Svenska Aeroplan AB, una compañía creada a finales de la década de los 30 para servir aeroplanos al ejército sueco. La Segunda Guerra Mundial llevó a la compañía a expandirse a otros mercados, entre ellos el de la automoción. Así, en 1944 comenzó el desarrollo de su primer modelo, que daría lugar al Saab 92. Su herencia aeronáutica llevó a dotar a sus coches de una gran aerodinamicidad y carácter deportivo.

Con los años, vendría una alianza industrial con Fiat para recortar costes. Esta sociedad, sin embargo, no fue suficiente y en 1990 GM se hizo con el 50% del capital. Diez años después, la multinacional adquiriría el capital restante. Más adelante, GM trató de hacer más eficiente la cadena de producción, y unificó plataformas con los modelos grandes de Opel, lo cual restó atractivo a los consumidores.

Tras dos décadas de pérdidas (los números rojos en 2008 ascendieron a 340 millones), la dirección llevó a la filial a concurso de acreedores en Suecia. En junio, GM hacía lo propio y anunciaba que prescindiría de Pontiac, Saturn, Hummer (vendida a una firma china) y de Saab. Además, dio marcha atrás a la venta de Opel. Esta semana GM vendió tecnología y patentes de Saab a la china BAIC.