_
_
_
_
_
Finanzas

Funcas estima que usar efectivo es el doble de caro que pagar con tarjeta

Usar cualquier medio de pago conlleva un gasto que repercute de forma desigual en el sector financiero, en el comercio, en el Banco de España y en los consumidores. Un estudio de Funcas estima que cada transacción con efectivo cuesta a la economía el doble que si se atiende el pago con una tarjeta de débito (1,461 euros frente a 0,651 euros). Aun así, el instrumento más oneroso es el talón (2,426 euros por compra). Las tarjetas de crédito exigen 0,724 euros por operación.

Es un viejo debate. Pero un viejo debate que carecía de cifras comparativas. Hasta ahora. Funcas ha publicado un estudio titulado Un análisis de los costes y beneficios del mercado de tarjetas donde analiza el impacto que tiene cada medio de pago (tarjetas de débito y crédito, cheques y efectivo) para las entidades de crédito, los comercios, el Banco de España y los consumidores.

Este informe, publicado en marzo y que ha sido realizado por expertos de la Universidad de Granada y de la Reserva Federal de Filadelfia (EE UU), señala que para el conjunto de las partes implicadas, el talón es la forma de pago más onerosa (2,426 euros por transacción). A continuación le sigue el efectivo, cuya existencia representa un pago de 1,461 euros por compra. Las tarjetas de crédito y débito tampoco salen gratis. Su presencia supone para el sistema una carga de 0,724 y 0,651 euros por operación, respectivamente.

Pero el peso que tiene una u otra forma de pago para cada una de las partes implicadas varía mucho.

El dinero de plástico es más rentable para las tiendas que los billetes porque activa las ventas

La actitud de bancos y cajas hacia los medios de pago depende de si actúan como emisores de ese medio de pago (por ejemplo, de una tarjeta o talonario) o si participan en la transacción como adquirentes (como cuando instalan un lector o TPV en un comercio).

Para estas últimas entidades, las tarjetas de crédito son un instrumento que genera una carga de 0,257 euros por transacción. Los bancos emisores, en cambio, logran una ganancia de 0,107 euros. Los plásticos de débito también suponen un desembolso para las entidades adquirentes (0,189 euros por operación) y ganancias a los emisores (0,561 euros).

El efectivo ocasiona pérdidas tanto para bancos adquirentes como emisores, mientras los cheques resultan rentables a las entidades en cualquiera de sus roles.

En términos absolutos, la banca afronta gastos en las operaciones con tarjeta de crédito (0,15 euros), débito (0,177 euros) y con el efectivo (0,063 euros), pero gana con los talones (0,561 euros)

Impacto para el comercio

Para los comercios, las tarjetas de crédito y débito suponen una carga importante en cuestión de costes. Pero según Funcas ambas favorecen el consumo y, por eso, suponen al final una merma en cada transacción de apenas 0,094 euros y 0,119 euros respectivamente. Además, evitan el fraude, algo que no ocurre con monedas y billetes, ni con cheques. El efectivo es, en principio, un instrumento más barato de aceptar, pero como no activa las ventas, resulta al final más caro para las tiendas que las tarjetas (0,286 euros). Los cheques son con diferencia la forma de pago menos rentable, porque descuentan 1,986 euros de media en cada venta.

La posición del Banco de España ante los medios de pago es prácticamente neutral al no estar involucrado en el negocio de tarjetas ni de talones. Tampoco incurre en pérdidas ni logra ganancias con la emisión de monedas y billetes.

Para los consumidores el efectivo es el medio de pago más caro por el tiempo que conlleva manejarlo (en el momento de pagar o de retirarlo de un cajero, por ejemplo), aunque cuenta con la ventaja de la privacidad a la hora de gastarlo. Las tarjetas aportan ventajas como el acceso a financiación o a programas de puntos, que les permiten ser, también en este caso, la forma de pago con un coste menor (0,48 euros para crédito y 0,355 para débito).

Ganar volumen para reducir costes

'Se pueden lograr beneficios sociales importantes reemplazando el efectivo y los talones por las tarjetas'. Esta es una de las conclusiones del informe elaborado por la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas). 'El grado en que este beneficio pueda materializarse depende en la existencia de incentivos para que las instituciones financieras produzcan y distribuyan tarjetas a gran escala', señalan sus autores.El estudio Un análisis de los costes y beneficios del mercado de tarjetas destaca, no obstante, que no todos los medios de pago se abaratan conforme pasa el tiempo. Entre 1992 y 2005 el cargo que representaron los talones para el conjunto de la economía ha subido. El motivo es que el número absoluto de operaciones atendidas con este instrumento ha caído un 18% en estos años, al tiempo que su peso relativo sobre el conjunto de transacciones menguaba.Las tarjetas y las domiciliaciones han aprovechado su mayor utilización, en cambio, para reducir en un 50% el coste que representan para el conjunto de la economía.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Archivado En

_
_