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Posiciones inamovibles

Eulen celebra hoy su junta sin lograr un pacto que zanje las disputas familiares

No hay pipa de la paz en Eulen. El primer grupo español de servicios a las empresas celebra hoy una junta extraordinaria de accionistas en Bilbao sin que la familia Álvarez haya alcanzado un pacto que zanje las disputas por el control de la sociedad.

Las posiciones siguen inamovibles. Por un lado, David Álvarez, titular del 51% del capital y fundador de la compañía. Junto a él, sus hijos Jesús David y María José Álvarez Mezquiriz, con otro 14%. Enfrente sus otro cinco descendientes (Pablo, Elvira, Marta, Juan Carlos y Emilio) con el restante 35% y que tienen, de momento, bajo control El Enebro, la sociedad patrimonial del grupo y titular entre otros activos de Bodegas Vega Sicilia.

En la junta de hoy, convocada a instancias de David Álvarez, el fundador puede hacer valer su posición accionarial para dar un vuelco a la gestión. Así si ejercita la mayoría sacaría adelante su proyecto para realizar un informe sobre gobierno corporativo "sobre la conveniencia de sustituir, en el plazo que se considere pertinente" el sistema actual de administradores solidarios (él y su hija María José) por un consejo de administración de cinco personas. Esta salida también contempla la incorporación de consejeros independientes.

Cinco de sus hijos, por otra parte, incluyeron en el orden del día el cese de los administradores solidarios y la incorporación de forma "progresiva" de consejeros imparciales. Igualmente han solicitado que se vote la constitución de un máximo órgano de gobierno elegido por el sistema proporcional, lo que les daría una notable presencia. Pretenden, asimismo, que la junta apruebe un consejo de ocho miembros de los cuales "inicialmente" un 40% se consensúe y, el resto, corresponda al porcentaje accionarial de cada uno de los miembros de la familia que podrán agrupar sus acciones.

El conflicto familiar en Eulen se inició a principios de este año cuando David Álvarez recurrió a una convocatoria extraordinaria de accionistas, convocada judicialmente, para recuperar el control de la compañía tras haber sido desalojado de la gestión por cinco de sus siete hijos.

La batalla continúa en Vega Sicilia

Mientras David Álvarez intenta recuperar el control de la gestión del grupo, la sociedad familiar El Enebro, dentro de la que se encuentran las bodegas Vega Sicilia, continúa bajo el control de parte de sus hijos y sin rendir cuentas a su padre. Sin ir más lejos, la semana pasada Vega Sicilia estableció una alianza con el Barón Benjamín de Rothschild para invertir 26 millones de euros en una producción vinícola en la Rioja Alavesa. La sociedad, participada al 50% por cada uno, contará con seis consejeros (tres de cada familia) y estará presidida por Ariane de Rothschild.

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