Endesa e Hisparroz invierten 1.240 millones en fotovoltaicas
El principal accionista del grupo de alimentación Ebro Puleva, el Instituto Hispánico del Arroz (Hisparroz), se ha unido a Endesa para invertir en el sector de la energía solar fotovoltaica.
La compañía eléctrica comunicó ayer que las dos sociedades han suscrito un acuerdo para desarrollar conjuntamente cuatro plantas de solar termoeléctrica. Cada una de ellas alcanzará una capacidad de 50 megavatios (MW).
Las cuatro instalaciones estarán ubicadas en el sur de la provincia de Sevilla y conllevarán una inversión de más de 1.240 millones de euros.
Los proyectos, cuya tramitación ya se ha iniciado, contarán con la participación mayoritaria de Endesa, aunque ninguna de las dos sociedades revela qué porcentaje de la inversión será realizado por cada firma. El proyecto estará en marcha, previsiblemente, a lo largo del año 2011.
Endesa señala que el Instituto Hispánico del Arroz aportará para el desarrollo de la actividad fotovoltaica los terrenos que posee en la finca sevillana El Italiano, donde se ubicarán las nuevas instalaciones. Por su parte, la eléctrica será la encargada de gestionar el desarrollo, ingeniería, construcción, montaje y puesta en marcha de las cuatro instalaciones.
Endesa prevé que las plantas posean un sistema de almacenamiento térmico que aumente y permita la producción incluso en periodos sin sol. Las plantas, cuya producción anual estimada será de unos 590.000 MWh netos, evitarán la emisión a la atmósfera de 306.700 toneladas anuales de CO2.
Con esta inversión, Endesa pretende reforzarse en el segmento de la energía solar fotovoltaica. Pero la operación tiene más relevancia para Hisparroz, ya que la sociedad (que controla más del 15% de Ebro Puleva) se adentra con ella en la inversión en renovables. Su participada, Ebro Puleva (que no está involucrada en esta inversión) ya está presente en el segmento energético con Dosbio, la sociedad que creó la compañía para agrupar sus inversiones en biocombustibles, donde la empresa englobará algunas de sus fábricas que dedicaba a la producción azucarera, tras convertirlas en plantas de producción de bioetanol.
Precisamente, Ebro Puleva tiene en marcha la reconversión de su división azucarera, ante la reestructuración del sector dentro de la Unión Europea. æpermil;sta podría saldarse con el cierre de tres de sus fábricas (dos en Andalucía y una en Castilla y León), aunque el grupo presido por Antonio Hernández Callejas aún no ha tomado una decisión definitiva.