Bruselas inquieta a las empresas químicas por las nuevas tasas para registrar sus productos

La Agencia Europea de Sustancias y Preparados Químicos, creada el año pasado para aplicar la nueva regulación comunitaria del sector, comenzará a recibir en junio de 2008 las primeras solicitudes de evaluación y registro de los productos químicos que se comercializan en la Unión Europea.

El sector, que se resistió con uñas y dientes a que se le impusiera esa obligación, espera ahora con inquietud a que la Comisión Europea decida las tarifas que cobrará la Agencia por llevar a cabo su labor. Y el primer listado ha dejado atónitos a algunos de los afectados.

Bruselas quiere cobrar entre 1.600 y 31.000 euros (algo menos a las pequeñas y medianas empresas) por cada solicitud individual de registro y entre 1.200 y 23.250 euros por las solicitudes conjuntas de varias empresas.

La Comisión calcula que más de 30.000 deberán pasar por la Agencia abierta en Helsinki. Y en los próximos 11 años, se calcula que ese organismo revisará más de 80.000 expedientes.

Pero una vez registradas las sustancias, las empresas químicas pueden encontrarse con nuevas facturas a cargo de la Agencia. La CE prevé cobrar entre 2.700 y 19.500 euros por la actualización del registro cuando varíen las toneladas de producción o entre 1.500 y 4.500 euros si una empresa solicita que se trate con confidencialidad ciertos datos de su documentación.

'El nivel general de las tarifas nos parece elevado', se queja un portavoz de la Asociación Europea de Distribuidores Químicos (FECC, en sus siglas en inglés), una organización que agrupa a unas 1.100 compañías del sector y a la que pertenece la Asociación Española de Comercio Químico (AECQ). La misma fuente lamenta 'la falta de transparencia y de justificación' que, a su juicio, presentan las tarifas de la Comisión.

Mayores costes

Bruselas había calculado que los costes de registro para el sector ascenderían a unos 2.300 millones de euros durante 11 años. Pero, según reconoce la CE, la factura puede ser mucho mayor porque durante la negociación del Reach el Consejo de la UE y el Parlamento Europeo incrementaron sustancialmente las atribuciones de la Agencia de Helsinki.

Este organismo, que en un principio contará con un secretariado de unas 80 personas, espera llegar a 450 empleados durante los próximos años. Se calcula que las tasas pagadas por la industria financiarán el 80% de su presupuesto. Y fuentes del sector temen que su contribución sea aún mayor porque 'algunos países incluso están presionando a la CE para que eleve aún más las tarifas previstas'.

El sector también se encuentra molesto porque Bruselas quiere cobrar las tasas 'entre 7 y 14 días después de que la Agencia haya cursado su recibo'. La industria cree que el plazo debería equipararse con la práctica comercial habitual de pago a 30 días.

Recursos

Las empresas podrán recurrir las decisiones de la Agencia Química Europea, pero abonando una tasa (irrecuperable en caso de desestimación) de entre 2.000 y 6.000 euros. El mismo procedimiento será gratuito si lo inicia la CE o un país de la UE.