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Alimentación

Ballvé pierde poder ejecutivo tras la fusión de Campofrío con Smithfield

Campofrío y Groupe Smithfield dan por hecha su fusión. Crearán la mayor cárnica europea, con un 37% del capital en manos de Smithfield Foods. La estadounidense colocará además a un nuevo consejero delegado, diluyendo así el poder del actual presidente Pedro Ballvé, quien compartirá las funciones ejecutivas. Smithfield limitará al 30% los derechos de voto para no tener que lanzar una opa.

Smithfield Foods va a controlar tanto el accionariado como la dirección de la nueva Campofrío, una vez concluya la fusión de su división europea con la compañía cárnica española. La multinacional estadounidense controlará el 37% del capital de la nueva sociedad (frente el 23,9% actual) y colocará como consejero delegado al máximo responsable de Groupe Smithfield, Robert Sharpe, presente en el consejo de Campofrío desde 2004. Compartirá las funciones ejecutivas con Pedro Ballvé, quien, pese a continuar en la presidencia ejecutiva de Campofrío, ve diluirse el control ejercido en los últimos años.

Los Ballvé rebajarán así su participación del 23% al 12%. De esta manera, dejarán de ser los segundos mayores accionistas de Campofrío, ya que por delante de ellos se colocará el fondo de capital riesgo Oaktree, que actualmente posee 50% de Groupe Smithfield. Los Ballvé sólo contarán con un representante en el consejo de administración, mientras Smithfield colocará a dos consejeros, uno de ellos su presidente, Larry Pope. El mismo número que Oaktree.

Pese al destacado papel que Smithfield Foods jugará en el nuevo gigante alimentario europeo, la compañía norteamericana quiere evitar tener que lanzar una oferta de compra por el 100% del capital de Campofrío. Para conseguirlo, durante los próximos tres años limitará sus derechos del voto por debajo del 30% (condición que exige la legislación para no lanzar una opa) y a no nombrar a más de la mitad del consejo de administración. Tampoco elevará su participación, excepto si se producen aumentos o reducciones de capital o si un tercero lanza una oferta de compra por Campofrío.

El nuevo grupo prevé conseguir unas sinergias de 40 millones hasta 2012

Ni Ballvé ni Smithfield prevén que la CNMV pongan trabas a la operación, que previsiblemente analizará en septiembre. Volvieron a recalcar que detrás de la fusión existen exclusivamente motivos empresariales e industriales, justificando así la petición de exención de opa al regulador 'No esperamos que haya problemas, creemos que cumplimos todos los motivos', apuntó Ballvé.

Smithfield dejaba la puerta abierta a una opa a partir de 2012, aunque según Ballvé 'se han tomado todas las medidas encaminadas a que eso no se haga'.

'Estamos satisfechos con el status quo actual y no es previsible que cambie', recalcó. Ballvé también resaltó que ambas compañías quieren mantener una parte de capital en Bolsa. 'Una de los acuerdos más importantes entre Campofrío y Smithfield es que la acción se mantenga cotizada en Bolsa, también en mercados donde no estamos', señaló. Entre los posibles parqués estarían las Bolsas de Londres y Fráncfort, pese a que el free float bajaría del 34% al 16%.

La nueva compañía generará unas sinergias de 40 millones de euros hasta 2012. Mientras que los costes alcanzarán entre 5 y 10 millones de euros, según apuntó Robert Sharpe. Ballvé resaltó que no se producirán reducciones de plantilla, ya que ambas sociedades son complementarias, por lo que tampoco esperan trabas por parte de las autoridades de Competencia.

Reconoció además que el grupo está abierto a nuevas adquisiciones, especialmente en los países donde ya está presente, como España, Francia, Holanda o Portugal. 'Será en la Europa rica', afirmó. Además, señaló que con esta fusión Campofrío está replicando la consolidación que llevó a cabo en España en 2000 cuando adquirió Navidul y Oscar Mayer. 'Alguien tenía que consolidar el mercado cárnico europeo. Nosotros reordenamos el sector en España y ahora hacemos lo mismo en Europa', aseguró.

Una jornada de turbulencias bursátiles

El mismo día que Campofrío y Groupe Smithfield daban por cerrada su fusión, la española se dejó en el parqué madrileño un 5,4% de su valor bursátil. Sin embargo, la caída durante la sesión fue mucho más severa, ya que llegó a apuntarse un retroceso del 17%. La lejanía de una opa por el grupo cárnico español, que Smithfield Foods quiere evitar alegando motivos industriales pese a superar el 30% de los derechos de voto que marca la ley, puede ser una de las razones de este descenso. Aunque también sigue la tendencia de Smithfield, que el viernes perdió el 19% de su capitalización después de que DA Davision rebajara su valoración a infraponderar. Campofrío realizará su fusión con Groupe Smithfield a través de una ampliación de capital del 49,6 millones de acciones, a un precio de 8,38 euros el título, por debajo de los 8,59 euros del cierre de ayer. Las nuevas acciones empezarán a cotizar, según los planes del grupo español, a finales de noviembre. Campofrío valoraba ayer los fondos propios de Groupe Smithfield en 415 millones, mientras que la sociedad estaría valorada en 679 millones.

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