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El grupo negocia refinanciar 560 millones de deuda

Apax se da hasta julio para recibir valoraciones sobre Panrico

La sociedad de capital riesgo Apax, que adquirió Panrico a finales de 2005 por 900 millones, se ha dado de plazo hasta julio para recibir valoraciones de la compañía. Al mismo tiempo, negocia la refinanciación de la deuda del grupo de alimentación.

La sociedad de capital riesgo Apax, una de las mayores firmas europeas del sector, se ha dado de plazo hasta mediados del mes de julio para recibir valoraciones sobre Panrico. La firma de inversión adquirió el grupo de alimentación fundado por la familia Costafreda en noviembre de 2005 por 900 millones de euros y en la actualidad negocia refinanciar una deuda cercana a los 560 millones.

La caída del consumo en España ha reducido los ingresos de la compañía y dificultado que Apax cumpla con el plan de pagos previsto con la banca que financió la compra de Panrico (en total, cerca de 100 entidades financieras).

La sociedad de inversión está inmersa en la "venta técnica" del grupo fabricante de Donuts, según informan fuentes conocedoras del proceso, a través de la cual Apax persigue obtener por parte del mercado una valoración de la compañía que facilite un acuerdo con la banca acreedora, explican. El hecho de que el grupo prevea cerrar una primera fase de esa "venta técnica" en el mes de julio obedece a que es en ese mes cuando finaliza el periodo de carencia de pago de deuda negociado con la banca (waiver). "Pero es un periodo que ya se ha acordado extender en otras ocasiones", señalan las citadas fuentes.

Entre las sociedades de inversión que preparan una valoración del grupo de alimentación se encuentra Permira. La sociedad de capital riesgo británica fue una de las empresas que más se interesó en 2005 por la adquisición de Panrico. La firma de inversión controla en España el capital de Telepizza, Cortefiel y Dinosol. "Si apareciera una muy buena oferta Panrico se vendería, pero ese no es el objetivo del proceso puesto en marcha", subrayan las fuentes consultadas. "La compañía está obteniendo buenos resultados, lo único malo que tiene es la deuda, pero ése es ahora mismo un problema común prácticamente a todas las empresas", recalcan. "Y Panrico no es una inmobiliaria", añaden.

Entre las opciones que se presentan a Apax en Panrico están la de inyectar más capital de sus fondos al grupo de alimentación o la de permitir la entrada de otro socio con el que intercambiar deuda por una participación en el capital de Panrico.

Compras y desinversiones

Nada más lograr la propiedad de Panrico la sociedad Apax llevó a cabo una serie de desinversiones para reducir la deuda en la que había incurrido en la adquisición. En diciembre de 2005 Apax ponía a la venta la sede en Barcelona de la compañía, un edificio de cuatro plantas de 4.000 metros cuadrados. Meses después ponía a la venta el negocio exterior del grupo. A principios de 2006 vendió por cerca de nueve millones su fábrica en China a Bimbo México, poco después de desprenderse de su factoría en Grecia. Panrico operaba en China desde el año 1997. En 2007 vendió el 50% de Dunkin Española a la estadounidense Dunkin Brands.

En 2008 Panrico adquirió el negocio de galletas Artiach a la multinacional Kraft Foods, con marcas como Chiquilín, Dinosaurus, Filipinos, Marbú Dorada. Y a principios de 2009 compró La Bella Easo al grupo italiano Barilla. A finales de 2009 el grupo cambio de equipo directivo, tras la marcha de Joan Cornudella como consejero delegado fichó a César Bardají.

La cifra

900 millones de euros fue el precio de compra de Panrico, anunciada en noviembre de 2005. Apax adquirió el 100% del grupo de alimentación.

Un balance soportado con la ayuda de Apax

Los propietarios de Panrico aseguran que no tienen intención de desprenderse del fabricante de pan de molde y que sólo sondean el mercado para ver qué interés despierta el dueño de Donuts.Sin embargo, la empresa fundada por la familia Costafreda no ha dado excesivas alegrías a los gestores de Apax, que adquirió la sociedad en 2005. De hecho, si no hubiera sido por las inyecciones de liquidez de la firma de capital riesgo la continuidad de la empresa estaría en peligro. No en vano, a finales de 2008 -el último ejercicio cuyas cuentas han sido publicadas- el grupo de alimentación asumía un patrimonio negativo cercano a los 100 millones de euros. Una negativa situación que se ha solventado gracias a los préstamos participativos inyectados por Apax y que la compañía capitaliza para cuantificarlos como fondos propios.Según consta en la citada memoria, Apax concedió a finales de 2006 dos préstamos participativos. En base a éstos, el patrimonio neto se elevaba a finales de 2008 a 86 millones de euros. Además, la firma de capital riesgo tiene el compromiso formal de renovar los préstamos a la sociedad en tanto ésta lo requiera. Una situación que, de prorrogarse en exceso, podría obligar a Apax a replantearse su futuro en Panrico.

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