Abertis y Telemadrid sospechan de posibles 'okupas' de la TDT

Okupas en la televisión digital terrestre? Telemadrid y Abertis sospechan que las interferencias sufridas el miércoles por decenas de miles de madrileños durante la retransmisión del partido disputado entre el FC Barcelona y el Inter de Milán, televisado por Telemadrid, fueron intencionadas.

Justo cuando iba a comenzar el encuentro, los telespectadores del canal autonómico de Madrid creyeron estar sintonizando una canal de pago. Las imágenes se cortaban, no llegaba el sonido. Las interferencias afectaron caprichosamente a decenas de miles de televisores en la capital: en una parte de la casa el partido no podía verse y en otra sí; mientras que la retransmisión se seguía sin problemas en la televisión de un bar, en el televisor del bar de enfrente era imposible. Y justo cuando finalizó el partido se restableció la imagen y sonido en todo el territorio donde emite Telemadrid.

"El martes Telemadrid nos comunicó que había recibido llamadas de algunos espectadores que habían perdido la señal entre las 18 y 19 horas", explican en Abertis, la compañía encargada de emitir la señal de los canales de televisión de ámbito nacional y de algunos autonómicos (entre ellos Telemadrid). "Se siguieron los protocolos establecidos para estos casos, pero los problemas desaparecieron en una hora", añaden. El miércoles, dos minutos antes de que se iniciara el encuentro, comenzaron de nuevo las interferencias. "Lo primero que se piensa es que pueda ser un fallo de uno de nuestros equipos, pero hicimos todas las comprobaciones y no detectamos nada, por lo que llegamos a la conclusión de que se estaba produciendo una interferencia por una señal ajena a Abertis", explican.

Expertos en telecomunicaciones comentaron ayer a este diario que para provocar esas interferencias son necesarios "un equipo transmisor y una antena que emita señal en la frecuencia de Telemadrid, un equipo industrial profesional como el que pueda tener una televisión local". Los mismos indicaron que lo especialmente llamativo del caso es la coincidencia de las interferencias con el horario del partido. "Es como si vas conduciendo por un carril en la autopista y otro coche lo ocupa".

Al no haber encontrado fallos en los equipos de Abertis, la compañía, y también Telemadrid, sospechan que pudieron ser víctimas de un boicot. Ambas presentaron ayer una denuncia ante la policía. No obstante fuentes de Telemadrid indicaron que en "último caso el responsable es Abertis, si esta compañía dice que los fallos son ajenos a sus emisiones, en principio hay que creerlo, pero es esta compañía quien debe ofrecer correctamente ese servicio", apuntaron.

Tras el incidente del miércoles el temor de más de un ejecutivo de televisión, ya sea autonómica, local o de pago, es que realmente pueda boicotearse una retransmisión televisiva aparentemente con tanta facilidad y que al grito de "¡un desalojo, otra okupación!" se vuelva a repetir lo ocurrido el miércoles en Telemadrid.