Rajoy anuncia para otoño una convención sobre reformas económicas "necesarias"

Será en otoño. Es el plazo fijado ayer por el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, para determinar con pelos y señales el armazón de la política económica con que concurrirá a las elecciones legislativas. De igual forma, indicó que no se celebrará el congreso del partido previsto este año sino en 2012 argumentando que "nadie entendería" entrar en este momento en "líos internos" del partido "con la que está cayendo en el plano económico". La convención programática del PP se celebrará, en cambio, a finales de septiembre o primeros de octubre, para completar el programa electoral con el que pedirán la confianza a los españoles en las elecciones generales.

Ante la junta directiva nacional, máximo órgano del PP entre congresos, Rajoy avanzó que la convención se estructurará en seis áreas: el empleo, la competitividad de la economía y el apoyo de los emprendedores, la educación, la reforma y modernización del sector público, el fortalecimiento institucional y la protección social. De momento, Rajoy ha marcado como vías de desarrollo limitar el número de consejerías regionales, iniciar una auditoría del gasto autonómico e imponerle un techo por ley y avanzar en la liberalización de sectores económicos.

"Soy de los convencidos de que España tiene solución y futuro y por eso vamos a pedir a los españoles un mandato reformista", dijo. En las próximas semanas el PP convocará sendas reuniones de la intermunicipal (en Sevilla, previsiblemente los días 30 junio y 1 de julio) y de la interparlamentaria (en Toledo, seguramente los días 14 y 15 de julio).

"A calzón quitado"

Aparte de completar el programa electoral, el líder del PP situó como segundo reto gobernar "bien" en sus autonomías y ayuntamientos, liderando la salida de la crisis desde las competencias de que disponen en este momento en cada una de las Administraciones. A su entender, el momento presente exige una "acción coordinada" de todas las Administraciones en el que prime la austeridad. Y por eso reiteró al Gobierno central la necesidad de que se convoque el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), la Comisión Nacional de Administración Local y la Conferencia de Presidentes.

Rajoy invitó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a hablar "a calzón quitado" de la realidad de las cuentas de las comunidades autónomas, en especial de los niveles de déficit y de deuda. A su juicio, en el próximo CPFF "se deberían debatir y aprobar con el mayor respaldo posible los planes actualizados" de reducción del déficit de las comunidades, para cumplir el objetivo de este año marcado por el Gobierno, en consonancia con las exigencias de la UE.