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Barajan trasladar temporalmente la producción a otros países

Las plantas japonesas amplían los paros por falta de componentes

La falta de electricidad y de componentes pasados 11 días del gran terremoto ha paralizado a las grandes compañías japonesas de electrónica y automoción. Algunas, como Sony o Toyota, se plantean sacar temporalmente su producción fuera de Japón.

Los cortes de electricidad y la falta de componentes empiezan a pasar factura a la industria nipona, como muestra el continuo goteo de anuncios sobre el cierre de grandes multinacionales de la automoción y la electrónica, como Toyota, Nissan o Panasonic. El mayor vendedor de coches del mundo, Toyota, anunció ayer que mantendrá al menos hasta el próximo sábado cerradas sus doce plantas, por segunda semana consecutiva, mientras Honda extenderá ese parón hasta el domingo.

Los efectos del terremoto y del tsunami también se han dejado sentir en los gigantes nipones de la electrónica. Sony anunció que cerrará hasta el día 31 otras cinco fábricas, aumentando a doce el número de plantas con la producción paralizada. Mientras tanto, el número de centros cerrados de forma indefinida es muy elevada: Panasonic, con tres plantas, Canon (7), Fujitsu (5) e Hitachi (7). Algunas multinacionales, como Sony o Toyota, están planteándose trasladar temporalmente parte de su producción fuera de Japón o buscar otros suministradores. Pese a que el Banco Mundial estima que la reconstrucción del país tardará cinco años y costará el 4% del PIB, el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, apuntó ayer que ese impacto se verá compensado en parte por las tareas de reconstrucción. Mientras tanto ayer continuaban los trabajos en la central de Fukushima para intentar estabilizar la temperatura de los reactores. Los operarios lograron extender cables hasta los seis reactores en un nuevo paso para reactivar el sistema de refrigeración. Pese a ello, el ministro nipón de Industria, Banri Kaieda, advirtió que la situación sigue siendo "extremadamente difícil". El número de muertos se elevó a 9.000 y el de desaparecidos a 13.000.

España hará controles de alimentos

La Agencia de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), dependiente del Ministerio de Sanidad, aseguró ayer que no ha entrado ningún alimento de Japón desde que se activaron los protocolos de seguridad por el terremoto en Japón. Así lo afirmó ayer el presidente de Aesan, Roberto Sabrido, quién aseguró que, pese a ello, se seguirán realizando controles sobre estos productos en los 42 puntos fronterizos españoles (22 puertos y 20 aeropuertos) donde trabajan más de 400 técnicos de aduanas.El presidente de Aesan recordó además que los productos que España importa de Japón son una cantidad "ínfima" frente al total de las importaciones de alimentos que realiza España. En concreto compra en torno a 2.000 toneladas de alimentos procedentes de Japón al año, de las que 1.400 son de pescado congelado (una cantidad mínima frente a las 350.000 toneladas de pescado que importa en un año). Por su parte, el Gobierno japonés extendió ayer la medición de radiación a todos los alimentos, tras detectarse contaminación en leche y espinacas.

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