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Potenciará los centros frente al recurso directo a familiares

Mato primará a las residencias en las ayudas a dependientes

El Ministerio de Sanidad dará un vuelco a las ayudas a la dependencia al cumplirse cinco años de la entrada en vigor de la ley. Las expectativas de empleo no se han cumplido, por lo que se dará prioridad en las ayudas a dependientes internados en residencias en lugar de a sus familiares por asistencia domiciliaria.

Ana Mato, ministra de Sanidad, reconoció ayer en el Congreso que la orientación de las ayudas concedidas al amparo de la Ley de Atención a la Dependencia ha provocado que no se cumplan las previsiones de empleo en el sector porque han primado las prestaciones económicas a cuidadores familiares por ser de menor cuantía que las destinadas a profesionales. Mato anunció ayer una "ponderación" en la financiación del sistema que incentive a los cuidadores profesionales, bien en residencias bien en servicios a domicilio.

El dinero que llegará a las comunidades será en función del coste del servicio y no del grado de dependencia del beneficiario. Hasta ahora las comunidades venían optando mayoritariamente por prestaciones a familiares por ser más barato que concertar una plaza en una residencia o centro de día.

Según Mato, el procedimiento para acceder a las ayudas se ha convertido en un "laberinto" para los beneficiarios y la cuantía es distinta en función del lugar de residencia. Hay un "desfase" de las previsiones del número de dependientes y de financiación, y se han generado 17 sistemas de dependencia diferentes. Por ello, se definirá un catálogo de prestaciones comunes en todo el territorio y habrá un baremo único de valoración de la situación económica del dependiente, cuyo proceso de reconocimiento se simplificará.

Mato compareció en la Cámara Baja para anunciar las líneas principales de actuación que pretende desarrollar en la legislatura. La ministra de Sanidad ofreció ayer a las comunidades un doble pacto sanitario y de servicios sociales, sobre el que se elaborará el anteproyecto de Ley de Servicios Básicos, que pretende garantizar un catálogo de prestaciones mínimas con suficiencia financiera en todo el territorio.

Central de compras

Esta nueva ley establecerá "claramente" los criterios de calidad y asistenciales, la priorización de los procesos según la gravedad, el tiempo máximo de respuesta y los derechos y deberes de los pacientes. Mato pretende impulsar también una nueva orientación al gasto farmacéutico para permitir a las administraciones que introduzcan criterios propios de eficiencia.

La deuda del sistema sanitario con proveedores asciende a 15.000 millones de euros, por lo que Mato se comprometió a plantear estrategias para "controlarla" sin menoscabar la prestación de servicios. Añadió que pedirá que los proveedores sanitarios tengan prioridad para cobrar de las administraciones públicas.

Una de las medidas de ahorro en las que piensa Ana Mato es la creación de una central de compras a nivel nacional para generar economías de escala e incorporar "criterios de homegeneidad" en el Sistema Nacional de Salud. La ministra anunció también un Plan Integral de Apoyo a la Familia y recordó el anuncio de Hacienda de que se revisarán los mínimos personales y familiares exentos de tributación en el impuesto sobre la renta. Esta se producirá cuando la coyuntura lo permita.

Las cifras

15.000 millones es la cantidad a la que asciende la deuda sanitaria. Mato pedirá que se conceda prioridad en el cobro a los proveedores de este sector.25% es el porcentaje de reducción de altos cargos que se ha producido en el Ministerio de Sanidad.2003 fue el año en que se aprobó la Ley de Ordenación de Profesiones, que Mato quiere revitalizar.

Impulso al registro de profesiones sanitarias

A pesar de que las competencias en sanidad están transferidas a las comunidades autónomas, el Ministerio tiene atribuciones para regular la actividad de los profesionales. Ana Mato quiere abordar en esta legislatura la ordenación de las profesiones sanitarias, títulos, especialidades y formación. También negociará con las comunidades el diseño de los modelos organizativos, funcionales y retributivos. Para ello, la ministra anunció que dará un impulso a la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias, que se aprobó en 2003 bajo el Gobierno de José María Aznar. Esta ley está "casi inédita" y por ello se ha producido "una dispersión normativa" que perjudica a los profesionales y al sistema sanitario.La ministra quiere crear el Registro Estatal de Profesiones Sanitarias, a lo que ya se comprometió también la anterior titular, Leire Pajín. Otros proyectos ya en avanzado estado con el anterior Gobierno, como las nuevas especialidades médicas y la implantación de la troncalidad en el MIR, serán retomadas por el equipo de Ana Mato. La inexistencia de un registro nacional de profesiones impide conocer el número exacto de facultativos que están ejerciendo en todas las comunidades ni su distribución por especialidades. Su creación es una demanda recurrente por parte de la profesión.Mato impulsará también la reorientación del grado universitario y del MIR.En el ámbito de la investigación, el Ministerio de Sanidad quiere crear una plataforma de innovación sanitaria que identifique y promueva la incorporación de las mejores prácticas, de la innovación diagnóstica, terapéutica y de gestión clínica en la asistencia sanitaria. Su objetivo es que los pacientes "se beneficien de la investigación lo antes posible".

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