La globalización eleva la brecha entre países, según el FMI
El FMI advierte que, coincidiendo con la expansión de la globalización, las desigualdades de renta en los países han crecido en los últimos 20 años. En el Informe de Perspectivas Económicas, el Fondo explica que los avances tecnológicos y la globalización financiera son las causas más relevantes.
Los economistas del Fondo explican que, aunque el ingreso per cápita ha aumentado en casi todas las regiones, incluso para los segmentos más pobres, éstos ingresos se han elevado más y más rápidamente 'entre los relativamente acomodados'.
El FMI ha utilizado el coeficiente de Gini, usado para comparar la diferencia promedio de ingresos, para sacar la conclusión de que la desigualdad ha aumentado en las economías de Asia, mercados emergentes de Europa, Latinoamérica y las avanzadas, pero se ha reducido en las zonas con más bajos ingresos, como África subsahariana y la Comunidad de Estados Independientes.
A diferencia de la corriente popular que señala como culpable de este fenómeno al crecimiento del libre comercio mundial, los economistas del FMI explican que la raíz de este fenómeno desde un punto de vista general está en el desarrollo tecnológico.
'El cambio tecnológico favorece a aquellos que tienen mayores cualificaciones, lo que amplía las diferencias que ya existen entre los trabajadores más preparados y los que menos lo están', elevando la diferencia de los ingresos de los más preparados y reduciendo la demanda de quienes lo están menos. Según el FMI, esta cuestión afecta tanto a los países desarrollados como los que están en desarrollo.
El desarrollo de la globalización financiera, y en particular la inversión extranjera directa, también han contribuido a este aumento de la desigualdad. Al margen de ese fenómeno solo se mantienen al margen México y Brasil, en el grupo de países en desarrollo, y Francia, entre los desarrollados.
Los analistas del Fondo explican que, aunque el acceso al capital puede reducir la desigualdad en los ingresos a la postre eso dependerá de la calidad de las instituciones financieras en cada país. 'Si estas instituciones son débiles beneficiarán más a los ricos ampliando las iniciales brechas', señala. El informe dice que la globalización comercial está, sin embargo, vinculada a una disminución de la desigualdad y no solo en los países avanzados. 'El avance de la integración comercial en las economías en desarrollo se ha mejorado la distribución del ingreso'.
Defensa de la integración comercial
La progresiva rebaja o desaparición de aranceles en el comercio mundial ha puesto en alerta desde hace tiempo a muchos ciudadanos de países desarrollo que ven como sus puestos de trabajo están desapareciendo o son amenazados por importaciones más baratas de países en desarrollo.En EE UU, la presión está siendo tan fuerte que en esta larga época preelectoral ni siquiera el partido Republicano, cuyo ideario económico siempre ha pasado por el empuje de la globalización, está en condiciones de enarbolar la bandera de la liberalización del comercio. Si a acaso, la del proteccionismo.El informe del Fondo admite que si la globalización sigue avanzando con estas desigualdades, se pondrá en peligro este mismo proceso de integración económica mundial y sugiere a los países que de cara al futuro apliquen políticas que ayuden a los grupos de bajos ingresos y menos cualificados 'a aprovechar las oportunidades que brindan el progreso tecnológico y la globalización'. Este apoyo pasa por mejorar el acceso a la educación y a la financiación que 'podrían mejorar la distribución global del ingreso'. Eso permitiría una mayor adaptación de los ciudadanos a los cambios que impone la globalización. En este punto, desde la institución internacional se vuelve a insistir en políticas que faciliten 'el movimiento de trabajadores de los sectores en declive hacia sectores en expansión de la economía'. El estudio hace mención especial a EE UU al sugerir que hay que reducir 'la dependencia de las prestaciones de salud del mantenimiento de un empleo en algunos países'.