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Berlín retrasa hasta septiembre la negociación del segundo rescate

El FMI acepta liberar su parte del préstamo a Grecia para evitar la quiebra

El Fondo Monetario Internacional liberará su parte del próximo préstamo a Atenas (3.300 millones) a pesar de que la UE no ha logrado aún un acuerdo sobre el segundo rescate de Grecia. La ayuda evitará la quiebra del país y permitirá a Berlín preparar una nueva propuesta de renegociación de la deuda helena, que espera presentar en septiembre.

La participación del Fondo facilita la liberación a primeros de julio del quinto plazo del rescate de 110.000 millones de euros pactado el año pasado. La nueva entrega asciende a 12.000 millones de euros (8.700 en préstamos bilaterales de los socios de la Unión Monetaria y 3.300 del FMI).

El FMI había amenazado con bloquear su parte si la zona euro no ofrecía un segundo plan de rescate que garantice la financiación del país durante los próximos doce meses. Alemania, que aporta casi el 30% del préstamo europeo, podría haberse negado también a seguir adelante sin el organismo de Washington.

Pero Bruselas descartó ayer ese escenario. Y el Fondo parece dispuesto a conformarse con el compromiso político de que la zona euro ampliará las ayudas a Grecia si el agujero fiscal crece más de lo previsto antes de que se logre un acuerdo sobre el segundo rescate. El Fondo reconoció ayer que la situación de Grecia se ha deteriorado en las últimas 24 horas y se mostró dispuesto a colaborar en el rescate "porque es un tema esencial para Grecia, para Europa y para la economía mundial".

La zona euro gana así tiempo para seguir negociando la segunda intervención, en la que Berlín quiere exigir una contribución del sector privado. "Ha sido difícil, pero estoy convencido de que con este planteamiento en dos pasos y con el acuerdo del FMI podemos evitar el escenario de la quiebra, que sería una catástrofe", señaló ayer el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn.

El primer paso, añadió Rehn, se podrá dar esta misma semana. "Estoy convencido", señaló el comisario, "de que el próximo domingo el Eurogrupo ministros de Economía de la zona euro podrá decidir sobre la liberación del quinto plazo de los préstamos a Grecia"

Rehn calcula que la entrega de esos fondos "permitirá la financiación d e la deuda soberana de Grecia hasta septiembre". La liberación definitiva de los préstamos, en cualquier caso, está supeditada a la aprobación en el parlamento griego del próximo plan de ajuste, un respaldo que el primer ministro griego, Yorgos Papandreu, tiene crecientes dificultades en conseguir.

Grandes líneas

La reunión de los ministros Economía el próximo domingo también abordará las grandes líneas del segundo plan de rescate con el objetivo, según Rehn, de cerrar un acuerdo el próximo 11 de julio.

Fuentes del Gobierno alemán, citadas por la agencia Reuters, indicaron sin embargo que la negociación debería prolongarse hasta septiembre.

Berlín necesita tiempo para buscar una fórmula de participación del sector privado en el segundo rescate que no sea calificada como suspensión de pagos por las agencias de rating. El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, ha creado un grupo de trabajo para diseñar un mecanismo que deber recibir también el visto bueno del Banco Central Europeo.

La cifra

6.000 millones de euros podría añadir la zona euro a los próximos préstamos a Grecia si los 12.000 millones previstos no bastan para cubrir sus deudas.

El Partido Popular Europeo cree que Grecia deberá salir del euro

El secretario general del Partido Popular Europeo (PPE), Antonio López-Istúriz, aseguró ayer en Washington que "es muy probable que Grecia se reestructure fuera del euro y creo que eso ocurrirá más pronto que tarde". La declaración del eurodiputado español del grupo Popular rompe con la línea oficial de las instituciones europeas, que descartan una salida de la Unión Monetaria.La intervención de López-Istúriz chocó además con las llamamientos lanzados ayer por la Comisión Europea y por el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, para que la oposición conservadora griega, perteneciente al PPE, suscriba un pacto de Estado con el Gobierno socialista de Yorgos Papandreu que garantice la aplicación de los planes de austeridad gobierne quien gobierne."No es el momento de partidismos porque hay demasiado en juego", advirtió Van Rompuy. Papandreu ofreció anteayer su dimisión para poder formar un Gobierno de concentración con otro presidente, pero los conservadores de Nueva Democracia rechazaron la oferta. Papandreu anunciará hoy la formación de un nuevo Gobierno para someterse el domingo a una cuestión de confianza.

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