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El ajuste económico se agudiza

La crisis del sector inmobiliario castiga a las arcas del Estado

La recaudación por IVA cae un 8,2% y se reduce el superávit en un 27,5%

La contracción de la actividad del sector inmobiliario provocó una severa caída de la recaudación del IVA del 8,2% en los dos primeros meses del año respecto a 2007. Ello se tradujo en una bajada del superávit hasta el 0,84% del PIB, cuando en el mes de febrero del año pasado el saldo positivo alcanzó el 1,23% del PIB.

Las arcas estatales se han visto dañadas especialmente por la menor recaudación de IVA en pequeñas y medianas empresas, sobre todo, en aquellas relacionadas con el sector de la construcción, explicó ayer el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, en la presentación de los datos de ejecución presupuestaria.

La recaudación de IVA de las pymes cayó en enero y febrero un 16,9%, agravando la debilidad que ya a finales del año pasado se observó en la recaudación de los impuestos directos. En las grandes empresas la tendencia se invirtió y la recaudación del IVA subió un 9%. Junto a la desaceleración inmobiliaria, Ocaña justificó los malos datos del IVA por la escalada del precio del crudo y por el aumento de las devoluciones.

En parte, la caída de ingresos por los impuestos indirectos se compensaron por el buen ritmo de crecimiento de los directos. El IRPF -que representa la principal fuente de ingresos del Estado- subió un 9,5%, por encima de las previsiones del Gobierno. Más espectacular fue la subida del 25,2% de la recaudación del impuesto de sociedades aunque el propio Ocaña aseguró que es prematuro sacar ninguna conclusión de este dato. Pero el crecimiento de los impuestos indirectos no fue suficientes para mantener el nivel de superávit, que se redujo hasta el 0,84%. En números absolutos, el Estado goza de un superávit en términos de caja de 9.381 millones de euros, un 27,5% menos que en 2007.

El 3,1%, difícil de cumplir

Sin embargo, el secretario de Estado de Hacienda aseguró que no existen elementos para vaticinar que no se cumplirán las previsiones del Gobierno, que calcula cerrar el año con un superávit del 1,15%. Aunque reconoció que es difícil que se cumpla la previsión de crecer a un ritmo del 3,1% este año. Con todo, Ocaña defendió que en los últimos años se han ganado 'la reputación de prudentes' a la hora de hacer estimaciones y ello les da margen para alcanzar su objetivo presupuestario con un crecimiento por debajo del 3,1%.

Aun así, Ocaña reconoció que el Ministerio deberá modificar sus previsiones cuando se haga efectiva la devolución de 400 euros a todos los contribuyentes que prometió el Gobierno antes de las elecciones. Previsiblemente, la medida se aprobará mediante un decreto ley en el primer o el segundo Consejo de Ministros.

Ocaña, que rehusó hablar sobre su continuidad al frente de la Secretaria de Estado de Hacienda, aseguró en la línea del ministro de Economía en funciones, Pedro Solbes, que el equipo que ha dirigido el ministerio de Economía en los últimos cuatro años se mantendrá.

En cuanto a los tributos especiales, el ritmo de recaudación ha sido dispar. Por el impuesto de hidrocarburos, el Estado recaudó en enero y febrero un 2,2% menos que en el mismo periodo del año anterior. Economía justifica la caída de ingresos por el aumento del precio del crudo que ha provocado una reducción del consumo. El alza más espectacular, del 18,3%, es para la recaudación del impuesto sobre las labores del tabaco.

En el capítulo de gastos, Ocaña destacó el incremento del 9,9% en pagos del Estado por gastos de personal. Economía lo atribuye 'en gran medida a la paga única a las clases pasivas por la desviación del IPC'. Los gastos por transferencia -dinero que el Estado envía a las comunidades autónomas, a los ayuntamiento y a la UE- alcanzaron los 13.613 millones en enero y febrero, un 7,7% más que en el mismo periodo de 2006.

El Gobierno no aumentará la deducción por vivienda

Los ruegos de la patronal para que el Estado extienda las medidas para atenuar la caída del sector de la construcción caen en saco roto. Ocaña descartó que el Gobierno aumente la deducción por compra de vivienda que esta semana había pedido la patronal de la construcción para espolear la demanda inmobiliaria. El secretario de Estado considera que esta medida no serviría ni para reavivar la demanda ni para facilitar el acceso a la vivienda. Ocaña aseguró que el Gobierno quiere cambiar de modelo de crecimiento y reducir el peso de la construcción en el PIB. Aun así, recordó que el Gobierno prevé medidas como la aceleración de la ejecución de obra pública y la apuesta por la rehabilitación de barrios para mitigar el parón de la construcción.

Ocaña mantiene el compromiso de publicar las balanzas fiscales

Carlos Ocaña mostró ayer su 'compromiso de dar a conocer' las balanzas fiscales. Ya antes de las elecciones, el ministro de Economía en funciones, Pedro Solbes, anunció la creación de un grupo de trabajo que publicaría las balanzas fiscales, una vieja reivindicación del nacionalismo catalán. Sin embargo, el secretario de Estado de Hacienda descartó que ello condicione la negociación del nuevo sistema de financiación que el Gobierno emprenderá en la primera parte de la legislatura. Ocaña no dio una fecha de publicación de las balanzas pero aseguró que el Ministerio será diligente. El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, por su parte, aseguró ayer que existe disposición de dar a conocer las balanzas aunque matizó que la decisión aún no está tomada.

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