Salgado: "Tener un plan B significaría que no tenemos seguridad en nuestro plan"

Salgado explicó ayer que un plan B, por definición, no es bueno "porque se transforma inmediatamente en Plan A". En una rueda de prensa en la sede del Banco Mundial de Washington, la responsable española de economía explicó que el Gobierno tiene un total convencimiento de que el plan A va a funcionar, y el déficit se va a reducir al 6% en el 2011, pero si se contempla otro de contingencia significaría "que no tenemos seguridad en el plan A".

Según la ministra no ha lugar a esa desconfianza porque el plan A se está cumpliendo. "los datos de los ocho primeros meses muestran que hemos reducido el déficit a la mitad. No debe haber ninguna duda de que cumpliremos el año próximo".

Miguel Ángel Fernández Ordoñez, Gobernador del Banco de España, y José Viñals, director de asuntos monetarios y mercados de capital del Fondo Monetario Internacional, consideran que las previsiones de crecimiento del Gobierno son muy positivas (1,3% en 2011) y que la realidad de un avance menor pondrá en peligro la consecución de la reducción del déficit. El FMI ha calculado que el PIB español crecerá apenas un 0,7% el año que viene.

En este contexto, Viñals dijo el miércoles que si se registra alguna desviación en la senda de la reducción del déficit porque la coyuntura terminara siendo más parecida a la que calcula el Fondo, entonces "se tendrían que arbitrar medidas de corrección necesarias con la mayor premura posible porque los mercados tienen hoy una tolerancia cero a los incumplimientos en las políticas de déficit público y de las mejoras de la competitividad de la economía". A juicio de Viñals, si hubiera algo que dificultara que España rebajara su déficit al 6%, lo importante es que "se adopten medidas presupuestarias que hagan que finalmente este objetivo se consiga".

La ministra reiteró que la máxima prioridad es llegar al compromiso del 6% y explicó que las medidas en marcha son suficientes porque los ingresos fiscales "son más altos de lo que habíamos previsto en los presupuestos". Salgado recordó que el FMI se ha equivocado en sus previsiones y que el año pasado por estas fechas preveían una caída del PIB del 0,7% y no del 0,3% como preveía el Gobierno. Esta previsión de la contracción del 0,3% la ha asumido el Fondo en la última revisión hecha pública el miércoles. La ministra recordó que la propia OCDE estima que el crecimiento será del 0,9% y en ese caso la discrepancia con el Gobierno no es tan elevada y el impacto sería mínimo.

Las discrepancias en el cálculo de la evolución española hechas por el Gobierno y el Fondo han llevado a esta institución a alertar que tanto España como EE UU van a ser los dos países que vayan a necesitar ajustes específicos para reducir la deuda en el año 2015, algo que Salgado también desestimó. "Para 2015 habrá una estabilización".

Según la ministra las discrepancias se basan en que el FMI considera que el consumo interno será menor de lo que calcula el Ejecutivo, estiman un distinto deflactor del PIB y tampoco hay coincidencia en cuanto al potencial del sector exterior que la responsable de economía estima mayor. Salgado explicó que, de momento, los datos le dan la razón y la tasa de ahorro se ha rebajado "y hay más consumo" mientras se mantiene la cuota de mercado exterior. En cuando a las previsiones de crecimiento, Salgado reiteró que con el 50% de los datos de cálculo del crecimiento en su mano puede decir que el Gobierno mantiene su posición de que no habrá caída del PIB en el tercer trimestre.

Nuevos yacimientos de empleo

La ministra dijo que la absorción del número de desempleados "nos va a llevar tiempo" pero matizó que ya prevén que en 2011 habrá creación de empleo neto, "en el entorno de 45.000 empleos de tiempo completo, pero teniendo en cuenta que va a haber un mayor número de contrataciones a tiempo parcial, el número de personas empleadas será mayor"

Salgado afirmó que la economía española como la de todos los países que tenían un amplio secror de la construcción, tenía que "encontrar nuevos yacimientos de empleo" y que hay que preparar mejor al millón de parados de este sector porque no todos volverán encontrar trabajo en su antiguo empleo." Necesitamos una economía más abierta y más exportadora además de nueva formación". La ministra recordó que el paro depende de la población activa y que en 2010 hay más gente empleada que en 2004 pero la población activa ha crecido mucho en vez de estabilizarse.

La responsable de economía no quiso referirse en detalle al tema que ha copado las reuniones de la Asamblea del Fondo Monetario a las que ha asistido, la guerra de divisas, y señaló que la postura de España en este tema es la que mantiene el BCE. Aunque explicó que se necesita cooperar para reequilibrar el crecimiento mundial y acabar con estas devaluaciones competitivas por parte de algunos países, Salgado dijo que las exportaciones españolas se dirigen en un 60% a otros países de la UE y por tanto el daño es menor.

En cuanto a las nuevas restricciones que el BCE para prestar a la banca, Salgado dijo que los datos que se manejan en su ministerio apuntan a que los recursos que la banca demanda de la autoridad monetaria han disminuido y no debería haber repercusiones en el sector español.