Madrid congela los tributos tras subir la cuota del IBI hasta un 150% desde 2003

Los madrileños verán como los gravámenes de los impuestos locales se mantienen en 2010 en el mismo nivel que este año, anunció ayer Ruiz-Gallardón. ¿Significa que no pagarán más impuestos? No. El mayor de los tributos locales, el IBI, seguirá aumentando a pesar de que por primera vez desde 2004 no se incrementará el tipo. Ello es así por el llamado catastrazo, que a partir del año 2001 revalorizó todos los pisos de Madrid para que el valor catastral se situara en torno al 50% del precio de mercado.

Sin embargo, el Ayuntamiento optó en 2001 por no aplicar de golpe el incremento de los valores catastrales y estableció subidas paulatinas durante los siguientes diez años. Así, en 2010, la mayoría de propietarios madrileños verán como su base imponible -que refleja el valor catastral de su vivienda- se incrementa y, por tanto, la cuota fiscal también aumenta.

Si bien las críticas por las subidas de impuestos y por la creación de nuevas tasas, como la de basuras, se han multiplicado en los últimas años, el catastrazo de 2001, que aún hoy los madrileños sufren, fue una decisión del Gobierno central. Además, desde 2004, el gravamen del IBI ha subido año tras año. Desde el Ayuntamiento argumentan que el tipo (0,581%) que se aplica en Madrid es de los más bajos en relación a grandes ciudades como Barcelona, Sevilla o Madrid.

Una vivienda de 124 metros cuadrados con garaje en el barrio de Carabanchel pagaba 218,4 euros por IBI en 2003. Y, este año, la factura fiscal subirá hasta los 493,4 euros, un incremento del 126% en seis años. Y para una vivienda céntrica de 150 metros cuadrados, la subida desde 2003 asciende al 155%.

Aun así, el Ayuntamiento de Madrid defendió que la capital es relativamente barata en comparación con las otras grandes ciudades. Según cálculos del Consistorio, una familia con dos hijos, una vivienda de entre 85 y 95 metros cuadrados, con un vehículo y una plaza de garaje pagan en Madrid 523 euros por los tributos locales, mientras que la misma familia en Sevilla abona 723 euros y en Barcelona 639 euros.

Gallardón también congelará la tasa de basuras, recién establecida. Aunque como sucede con el IBI, el aumento del valor catastral -que fija la cuota a pagar- provocará que a efectos prácticos la tasa de basuras se encarezca. Aun así, el Ayuntamiento ha elevado los límites de exención. Este año, una vivienda con hasta dos personas empadronadas que no alcanzan los 620 euros de ingresos mensuales, no deben pagar la tasa de basura. En 2010, el umbral se situará en 685,4 euros mensuales.

Por otra parte, el Ayuntamiento rebajará en un 2% el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), que grava a comercios y empresas. Además, se crea una bonificación por creación de empleo. Así, aquellas empresas que durante este año hayan incrementado su plantilla con contratos indefinidos podrán reclamar una rebaja. La bonificación máxima se sitúa en el 25% para las empresas que han aumentado en un 25% o más su plantilla.

Si bien Gallardón destacó que los impuestos "ni siquiera se actualizarán" con la inflación, en lo que va de año los precios han caído. En los primeros nueve meses del año, el IPC interanual medio se ha situado en una tasa negativa del 0,4%. La decisión del Ayuntamiento contrasta con la adoptada el año pasado, cuando decidió actualizar los tributos de 2009 tomando como referencia la inflación de 2008. Ese año, el IPC había aumentado un 4,1%.