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Reformas para salir de la crisis

Empresas y fondos, interesados en pujar por el 49% de la nueva AENA

El relanzamiento de los planes del Gobierno para una privatización parcial de AENA y la concesión de Barajas y El Prat ha provocado una reacción positiva entre los grupos empresariales y financieros que podrían participar en el proceso. Abertis y Ferrovial estudiarán el proyecto y esperan precisiones.

El anuncio realizado ayer por el presidente del Gobierno sobre la reforma y privatización parcial del sistema aeroportuario, movió ayer una cadena de reacciones positivas entre las entidades especializadas en la gestión y financiación de infraestructuras.

En un encuentro con periodistas, el ministro de Fomento, José Blanco, señaló que ya había recibido muestras de interés por parte de fondos de inversión de diferentes puntos del mundo y de las principales empresas españolas de gestión aeroportuaria.

El plan presenta notables cambios en relación a propuestas anteriores. Destaca la decisión de elevar desde el 30% hasta el 49% el porcentaje del capital de la nueva AENA Aeropuertos que se dejará en manos privadas. Además, se introduce el régimen concesional en la operación de las principales plazas del país, empezando por Madrid-Barajas.

Desde Abertis se considera positiva la apuesta por el modelo de concesión, aunque dice estar a la espera de más detalles. El grupo que preside Salvador Alemany ve más ajustado a su negocio la puja por Barajas y El Prat que la entrada en AENA.

Desde Ferrovial, mayor operador aeroportuario privado del mundo a través de BAA, ya se analizaba ayer la propuesta.

En cuanto a otros candidatos para dirigir el aeropuerto de Madrid, el director general corporativo de ACS, Ángel García Altozano, declara que su grupo se decanta por infraestructuras por construir. Y desde Globalvía se priman en estos momentos los proyectos ferroviarios. Fraport y Aeroports de Paris, por su parte, esperaban un giro en el modelo, como el que se ha producido, para plantearse invertir en los aeródromos españoles.

Portavoces de Fomento se mostraron reacios a hablar del volumen económico del proceso. Señalaron que una valoración por el 100% de AENA podría ascender a unos 30.000 millones. Teniendo en cuenta que la deuda de la empresa asciende a 12.000 millones y que se venderá el 49%, la estimación de ingresos se situaría alrededor de los 9.000 millones. A ello el Gobierno añadiría los ingresos por las concesiones.

Esta reforma arranca mañana con la aprobación de un decreto ley que plantea la creación de una sociedad denominada AENA Aeropuertos, a la que se adscribirán el patrimonio y los bienes en gestión del sistema.

Una vez constituida, se articulará un "cuaderno de venta" de hasta el 49% del capital sin descartarse una salida a Bolsa.

Una vez vendido el 49%, la nueva gestión público-privada de la empresa podrá decidir que un número determinado de terminales aéreas sigan en régimen de gestión directa, como hasta ahora, o crear una filial para cada uno de aquellos aeródromos que "precisen una gestión individualizada". Una tercera vía será la convocatoria de concursos para cada gran aeropuerto.

Desde Fomento se afirma que "las concesiones serían por un largo periodo", y recordaron que la ley fija un límite en 40 años. Las empresas privadas adjudicatarias podrían "mejorar la explotación comercial de los aeropuertos" y establecer libremente tarifas de aparcamiento de coches, alquiler de locales comerciales, etcétera. Por el contrario, las tasas de aterrizaje, pasajeros, seguridad y aparcamiento de aviones se mantendrían como precios regulados.

Para asegurar la sintonía con las autonomías, donde se ubica cada aeropuertos, se creerán "comités de coordinación". En estos foros, Gobierno, poderes autonómicos y los gestores privados decidirán planes urbanísticos, abordarán problemas de ruido, diseñarán las comunicaciones con los aeropuertos, etcétera.

Hasta 5.000 millones por el 30% de Loterías

El Gobierno prevé ingresar entre 4.000 y 5.000 millones de euros con la privatización del 30% de Loterías y Apuestas del Estado (LAE), la compañía que gestiona juegos como la Quiniela o el Gordo de Navidad.LAE representa una de las empresas más rentables para el Estado. En 2009, ingresó 9.800 millones de euros un 2% menos que el año anterior. El beneficio neto anual ascendió a 3.000 millones. La Mesa de Asociaciones de Administraciones de Lotería, que reúne a las organizaciones Apla, Anapal y Fenapal, denunciaron ayer que la privatización supone "un atropello para todos los españoles" y añadieron que resulta "vergonzoso que algo que se creó para darle un beneficio al Tesoro Público se vaya a pasar al sector privado".Además, aseguraron que la medida no responde al deterioro de la deuda soberana en las últimas semanas. Y recuerdan que el Gobierno ya incluyó medidas en la Ley de Presupuestos Generales para facilitar la venta de LAE, que controla el 30% de la cuota de mercado del sector del juego.Por otra parte, está previsto que antes de enero se apruebe la Ley del Juego, que permitirá regular todas las modalidades de juegos de azar, en especial aquellos que se gestionan a través de internet. La legislación, que establece la creación de un nuevo impuesto que será diferente para cada tipo de juego y que recaerá sobre los operadores, persigue modernizar el sistema actual mediante la transformación del organismo Loterías y Apuestas del Estado en sociedad estatal. Los responsables de LAE aseguran que pretenden dotar de racionalidad un modelo de gestión que han tachado de "casi feudal".

La cifra

9.000 millones de euros, deuda aparte, podrían pagar los grupos interesados por el 49% de AENA Aeropuertos.

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