Fiebre anticrisis por los centros comerciales

Baricentro, en Barberà del Vallès (Barcelona), ostenta el título de primer centro comercial moderno de España. El primero para un sector que no ha parado de crecer en 30 años y que, aun en tiempos de crisis, sigue apuntando conquistas en forma de aperturas. Además, la grave situación del inmobiliario recibe un soplo de aire gracias a las operaciones que genera.

Pero en la Asociación Española de Centros Comerciales (AECC) lo dejan claro: "Los centros comerciales no son un sector refugio en tiempos de crisis". "Para estar en este mundo hay que saber gestionarlo y conocerlo", insisten. Resulta tentador ya que, incluso en los tiempos que corren, sus resultados continúan siendo optimistas.

El año 2010 terminará con 12 centros comerciales nuevos que ampliarán la superficie bruta alquilable (SBA) en casi 400.000 metros cuadrados; todo ello gracias a una inversión en torno a 800 millones de euros. Y más aún: los expertos aseguran que estos nuevos nacimientos crearán 10.000 nuevos puestos de trabajo.

A esta lista se debe restar el único cierre producido en años: el del Centro Comercial Avenida M-40 de Madrid, que según declara Alberto Bravo, director general de gestión de centros comerciales de Sonae Sierra España (empresa gestora), "ha sido una situación aislada ligada a la paralización del desarrollo residencial de la zona y a la confluencia de excesiva competencia en un área reducida".

Cualquier ciudad es ahora destino preferente para construir un centro, además, la carrera que disputaban Madrid y Barcelona parece haberse frenado. Alicante, Las Palmas, Murcia o Jerez, entre otras, recibirán próximamente sus nuevos espacios, muchos de ellos de la mano de operadores de gran atractivo para los compradores, como la cadena sueca Ikea o la británica Primark.

Precisamente son los operadores los que, la mayoría de las veces, marcan el futuro de los nuevos centros, al extenderse, cada día más, el modelo de parque comercial, un tipo de espacio que obliga al consumidor a desplazarse a la periferia de las ciudades. Alberga edificios de gran tamaño imprescindibles para satisfacer las necesidades de las firmas, que además requieren mucho suelo disponible.

"Sí, todavía hay espacios libres idóneos para el sector retail", asegura el director de Sonae Sierra. Por otro lado, desde la AECC explican que el concepto de centro comercial "no es algo material que cumpla unos requisitos obligatorios, la fórmula es intelectual, existe desde que eres capaz de juntar público dispuesto a comprar". Bajo estas palabras se esconde otro de los puntos de interés en el futuro del comercio en España, los llamados espacios comerciales de centro de ciudad.

La otra tendencia está en la creación, rehabilitación o construcción de lugares comerciales en pleno centro de ciudad. De esta forma, se aprovecharían edificios en desuso para la instalación de tiendas y se lograría multiplicar la cuota de mercado, que actualmente está en el 15% del total del minorista. El comercio tradicional de los centros urbanos pide a gritos una reconversión.

Borja Reig, responsable de retail de Jones Lang LaSalle, explica que, además de lo anterior, existe otra pauta en la promoción de centros en la actualidad: la apertura en fases. "Hay muchos centros que inauguran con algún operador locomotora que no quiere esperar al resto de tiendas y más adelante se va abriendo la zona comercializada". Un buen ejemplo de ello es Hipercor; hace unos meses puso en marcha otro gran almacén en el Centro Comercial El Tiro, en El Espinardo (Murcia), y ahora están a la espera de la fase final del proyecto.

Reig cuenta que otra de las tendencias actuales es "construir según se venden las parcelas de los parques comerciales", al margen de si hay o no vecinos, por ello, resulta complicado adivinar el tamaño del proyecto. Además, las ampliaciones de complejos donde el funcionamiento es óptimo están, en tiempos de crisis, en boga. Este es el caso de La Maquinista en Barcelona o Las Arenas en Las Palmas.

Es también efecto de la crisis que los inversores busquen la máxima rentabilidad en el menor tiempo posible. Según los datos de la consultora inmobiliaria Aguirre Newman, el inversor extranjero protagonizó el 100% de las operaciones en centros comerciales que se dieron durante el año 2009. Por su parte, la AECC asegura que en ese periodo se crearon 320.000 metros cuadrados de superficie bruta alquilable y todo ello a pesar de un retroceso en las ventas del 6%. Fuera de nuestras fronteras son conscientes también de la proyección del sector.

¿Hasta dónde puede llegar esta fiebre por el comercial? Los expertos responden que "el retail tiene aún mucho crecimiento posible". Los espacios dejaron de ser tradicionales hace algunos años, y ahora "prima el ocio", explica García-Renedo. Cines, restauración y hasta interesantes ofertas como pistas de patinaje sobre hielo o una estación de esquí a cubierto, como la existente en el Centro Comercial Xanadú en Arroyomolinos (Madrid), están de moda desde hace tiempo. Y precisamente fue Xanadú el espacio que marcó un antes y un después.