Casas y materiales más eficientes, a prueba
Si el cubo de Rubik era un rompecabezas, el edificio Kubik nos enseñará a construir con más cabeza
Imagínense un edificio que se pueda desmontar y volver a armar en función de sus necesidades. Y que, además, en él se puedan probar cómo funcionan los nuevos materiales de construcción que acaba de diseñar su empresa o saber cómo se comporta en condiciones reales cualquier innovadora solución constructiva. Si, además, el objetivo de sus investigaciones industriales es el mejorar la eficiencia energética y lograr optimas condiciones en climatización, iluminación y acústica, Kubik es lo que busca.
Eso pensaron los responsables de la corporación tecnológica Tecnalia cuando comenzaron a idear este edificio a modo de laboratorio de ensayo, puntero y singular a nivel mundial, para la investigación, desarrollo e implementación de tecnologías de arquitectura y construcción sostenibles y ecoeficientes. Máxime cuando la normativa aprobada por la Comisión Europea para la gestión energética de viviendas de nueva construcción obligará en el año 2020 a que las nuevas edificaciones tengan un reducido consumo energético.
Esta infraestructura para la I+D+i se empezó a construir en septiembre de 2008, en la sede de Labein-Tecnalia sita en el Parque Tecnológico de Bizkaia y el pasado mes de junio fue inaugurada oficialmente por la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor.
Puede generar escenarios totalmente realistas
La singularidad principal de Kubik consiste en su capacidad de generar escenarios realistas. Sobre esa realidad se va a investigar la eficiencia energética resultante de nuevas soluciones constructivas de forma que se puedan gestionar con mayor inteligencia los sistemas de climatización e iluminación y el suministro procedente de energías renovables.
Para ello, el edificio es capaz de configurar un máximo de 500 m2 distribuidos en una planta sótano y hasta otras tres plantas sobre rasante.
Los responsables de este proyecto explican que la eficiencia energética en edificación se consigue mediante tres factores: la mejora de las soluciones arquitectónicas o constructivas y de las prestaciones de los materiales empleados; la reducción del consumo mediante un uso racional de la energía para la climatización, iluminación y ventilación de los espacios habitacionales, y, por último, en el incremento de la generación basada en energías renovables, haciendo al edificio corresponsable en la generación de la energía necesaria para el desarrollo de las actividades que alberga.
Con la idea de conjugar estas variables se ha diseñado Kubik, que cuenta con un sistema de monitorización y control que permitirá evaluar, de manera integral y en condiciones más realistas que las ofrecidas por los laboratorios actuales, las prestaciones de todo un edificio, en diferentes configuraciones y soluciones constructivas, obteniendo información sobre el aislamiento térmico y acústico y la calidad del aire interior. Incluso se medirá la temperatura y humedad en las diferentes capas de los elementos constructivos. También, el proceso de montaje y desmontaje servirá para evaluar los procesos industrializados de construcción y, algo más subjetivo, la calidad arquitectónica de los sistemas y materiales constructivos.
El objetivo es desarrollar nuevos productos y componentes constructivos (para envolventes) y sistemas de gestión para la eficiencia energética, pero también diagnosticar, evaluar y demostrar la eficiencia energética y el buen funcionamiento de componentes constructivos e instalaciones y desarrollo de modelos y metodologías de predicción. De ahí que Kubik quiera, además, servir de plataforma para el lanzamiento comercial de los nuevos productos tecnológicamente avanzados para arquitectos, ingenieros, promotores.
Las piezas del cuadrado
El edificio Kubik tiene varias caras. No es sólo una infraestructura en forma de cubo, es mucho más.En primer lugar, es un edificio experimental desmontable y que se puede configurar de varias maneras para crear los espacios habitacionales que los investigadores necesiten para el estudio, así como el montaje de los componentes constructivos que se deseen evaluar de forma integral y en condiciones de uso realistas.Además, Kubik cuenta con un moderno sistema de monitorización y control imprescindible para la correcta investigación de soluciones basadas en tecnologías para la gestión inteligente de la energía en el edificio, además de para el propio análisis y evaluación de los componentes instalados. Un elemento clave para la consecución de conclusiones científicas.El edificio incluye como tercer gran elemento las infraestructuras necesarias para la generación de energía basada en fuentes renovables destinadas a la alimentación del edificio experimental. Es decir, un generador eólico, paneles fotovoltaicos y de geotermia, colectores solares y varios otros sistemas pasivos.
Claves
Un laboratorio de ensayo único-Realidad: se diferencia de otros laboratorios de ensayo en su capacidad de crear escenarios reales.-Flexibilidad: se pueden configurar hasta 500 m2, distribuidos en una planta sótano y hasta otras tres sobre rasante.-Evaluación: cuenta con un sistema de monitorización y control para facilitar la evaluación.-Comercial: plataforma de lanzamiento de nuevos productos tecnológicamente avanzados.