"Los particulares no aceptarán vender electricidad"
La Fundación Tierra defiende el autoconsumo de electricidad fruto de la energía solar fotovoltaica, pero rechaza la idea de que esto obligue a los particulares a convertirse en empresarios.
¿Qué aportará al desarrollo de la fotovoltaica la conexión de los hogares a la red eléctrica?
Es un error, igual que el que se cometió en 1998. Entonces, la prima que se ofreció por producir electricidad fue de 60 pesetas hasta 5 kW (el consumo de un hogar). El requisito fue constituirse en una empresa. Y entonces no se apuntó casi nadie.
¿Por qué creen que los particulares no se apuntarán a la medida que prepara el Gobierno?
Porque el consumidor lo que quiere es libertad. Y esta medida sigue la lógica de que los particulares tengan que registrarse ante la Comisión Nacional de Energía a través de un intermediario acreditado y emitir facturas. Este decreto simplifica la burocracia, pero no cambia el concepto.
¿Qué modelo defiende la Fundación Tierra?
Lo que el particular necesita es una tarifa fijada por el Estado, con un precio regulado. De este modo, instalará paneles fotovoltaicos en su hogar, sabiendo que puede ahorrar energía y así dinero en la factura.
La prima es un incentivo de carácter arbitrario e incierto, que en caso de desaparecer anula las herramientas disponibles para justificar la auto producción, y entonces se volverá al sistema inicial.
¿Es positivo el autoconsumo de energía eléctrica?
Claro que es positivo, pero hay que ver cómo se hace. En Alemania, el 80% de la fotovoltaica está sobre los tejados de los hogares. En España, ese mismo porcentaje está en huertas solares, por las primas que atrajeron a las empresas.