La revisión del sistema pone en cuarentena a las eléctricas

El efecto del pacto de Estado alcanzado por el Gobierno y el PP para reformar el sector eléctrico no ha hecho más que empezar, pero ya se ha reflejado con dureza en las cotizaciones de las compañías. El castigo ha afectado a las eléctricas integradas, a las centradas en energías renovables y a los transportistas y gestores del sistemas. Las pérdidas en las dos últimas jornadas van desde el 10% y el 7% de REE e Iberdrola, las más castigadas; a los 3,4% y 2,8% de Endesa y Gas Natural -la que menos-. Acciona y Enagás se dejan un 4% y un 6,9%.

Para las sociedades de análisis y bancos de inversión la decisión de abrir en canal el sector y debatir el sistema de tarifas es casi un shock, porque nadie se esperaba esta alianza, en principio muy ambiciosa, y menos cuando la aprobación del alza tarifaria y la reforma de las primas a las renovables se encontraban en la pista de salida. Société Générale decidió el viernes recortar un 15% de media el precio objetivo de estas compañías.

Y ¿cuáles son las primeras conclusiones ante un proceso complejo y que se perfila largo? Además de la sorpresa, las reacciones son en general abiertamente negativas. Se pronostica pérdida de atractivo para los inversores -especialmente para los institucionales extranjeros-, que ya no estaba precisamente por las nubes, y más volatilidad. Serán las consecuencias del fuerte aumento de las incertidumbres para una etapa que podría extenderse durante los próximos meses.

"El riesgo se ha intensificado en España con la decisión de revisar el marco energético. Ahora es preferible evitar las empresas más expuestas a esta incertidumbre regulatoria, como son Iberdrola, Gas Natural, EDP y Enel (propietaria de más del 90% del capital de Endesa)", señala el equipo de Nomura.

Para JBCM, se trata de una decisión inesperada y negativa, que profundiza la inseguridad. A la espera de conocer las modificaciones normativas, la firma cree que Endesa e Iberdrola pueden ser las más penalizadas por varios factores y las consideran las más expuestas al riesgo, puesto que Industria podría actuar sobre la remuneración de hidroeléctricas y nucleares, y además en distribución.

Son deducciones compartidas por otros expertos. Por el equipo de JP Morgan o por Goldman Sachs, que califica la decisión del Gobierno y el PP de mala noticia para el sector. Las palabras riesgo, interrogantes, intervencionismo, peligro están entre las más utilizadas. En los análisis subyace el temor de que el problema del déficit tarifario se agudice, por la congelación de la subida de tarifas.

"El impacto inmediato es que el déficit no se verá compensado por un aumento de la factura que pagan los consumidores; por tanto las empresas lo seguirán soportando en sus balances", se indica desde Santander Research. En este contexto, UBS espera más volatilidad al menos hasta octubre. Y Citi más presiones, incluso si el resultado final no es absolutamente negativo.

Sin obviar los riesgos o que el pacto se traduzca en un maquillaje que no resuelva los fuertes desequilibrios del sistema, algunos expertos y alguna empresa exponen conclusiones más allá del preocupante corto y medio plazo. Son opiniones que parten de la idea de que la situación actual es insostenible, con una tarifa incapaz de absorber todos los costes y subvenciones que soporta -como las primas a las renovables-, y en una etapa poco idónea para fuertes subidas.

En este contexto, Gas Natural Fenosa valoró el viernes "con satisfacción el anuncio del pacto entre PSOE y PP". En su opinión puede servir para realizar una revisión en profundidad y para lograr un marco jurídico estable. Una remodelación que afectaría desde el pool (mercado de generación) al apoyo a un tipo de centrales en detrimento de otras.

Y ¿cuáles serán las empresas más perjudicadas? Si bien lo que predomina son las interrogantes respecto a cómo será la nueva normativa, la mayor parte de los expertos cree que, en primer lugar, las más afectadas serán las que soportan mayor déficit tarifario -Endesa e Iberdrola-, que además corren más riesgo por su mix de generación. Están algo más positivos en Gas Natural e, incluso, en las renovables eólicas. Añaden que el castigo a REE y Enagás viene de la mano de las dudas sobre las futuras inversiones y remuneraciones.