Biochip que pronostica el cáncer de próstata

Pronosticar el cáncer de próstata, determinar cómo va a evolucionar la enfermedad en cada paciente, conocer a priori si es conveniente o no practicar una cirugía o si el paciente sufrirá la reaparición del tumor mediante una simple muestra de saliva o sangre son las principales aportaciones de un biochip que actualmente está desarrollando el laboratorio español Juste SAQF, en colaboración con un socio biotecnológico. Se trata de un proyecto de nanotecnología que ayudará a reducir el gasto sanitario absorbido por esta patología, de la que cada año se diagnostican 16.500 nuevos casos.

Este proyecto, que antes de llegar al mercado (como muy tarde el año que viene) ya ha despertado el interés de múltiples farmacéuticas internacionales, no es el único que en estos momentos desarrolla el laboratorio, dentro de su apuesta por la investigación en la medicina personalizada, un capítulo que absorbe el 30% de su inversión total en I+D.

La farmacéutica también tiene a punto de caramelo el desarrollo de otros dos biochips, que ayudarán en el diagnóstico de la enfermedad autoinmune artritis reumatoide, de la que cada año se diagnostican 5.000 nuevos casos, así como del trastorno de déficit de atención e hiperactividad.

æpermil;stas son sólo algunas de las contribuciones de un laboratorio que, pese a su tamaño, ha conseguido codearse con las grandes multinacionales del sector, gracias a una estrategia basada en el posicionamiento en nichos de mercado específicos y la intensificación del lanzamiento de nuevos medicamentos, como forma de sortear la crisis. "Las compañías pequeñas tienen que ser rápidas para posicionarse en nichos de mercado concretos, pero también es verdad que para ellas es más sencillo dar marcha atrás", reconoce Inés Juste, consejera delegada del laboratorio familiar.

Esta estrategia le ha supuesto a la compañía invertir en los últimos tres años más de 10 millones de euros en investigación de desarrollos, dentro de sus tres divisiones, terapéutica, hospitalaria y de consumo. Dentro de la división terapéutica, que incluye la salud de la mujer, el sistema nervioso central y biotecnología, el laboratorio está a punto de registrar un tratamiento (fórmula galénica) para las lesiones genitales externas producidas por el virus del papiloma humano, que sólo en España afecta a más de 800.000 personas. Asimismo, el laboratorio también ha apostado por fármacos para la gestación, menopausia, síndrome premenstrual, así como la migraña.

Sin embargo, la empresa no ha dirigido todos sus esfuerzos en la misma dirección. También ha realizado una fuerte inversión en seis nuevos productos dentro del canal cosmética, farmacia y autocuidado, un poco más a salvo de los recortes del Gobierno. Un tratamiento, que evita la degeneración macular (Oculife) debido a la edad, ceramidas antienvejecimiento y un complejo Omega 3 son algunos de los productos más destacados de esta división.