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Telefonía

Telefónica compra acciones propias por 620 millones en plena caída por la opa de O2

Telefónica ha dado un gran paso en su programa de recompra de acciones y lo ha hecho en plena caída por la opa sobre O2. En los últimos días ha adquirido un 1% del capital por 620 millones y lo eleva hasta el 2,78%. Los casi 50 millones de títulos comprados suponen el 7% del volumen total negociado durante las jornadas en las que ha podido adquirirlos.

Los programas de recompra dan un arma única a las empresas que los tienen en marcha para comprar acciones en importantes volúmenes justo cuando más beneficioso es para la cotización. Telefónica no es ajena a ello, sobre todo porque debe cumplir una promesa de adquisición de títulos propios por un montante de 6.000 millones de euros hasta 2007, y lo hará cuando más le convenga.

La caída en Bolsa provocada por la opa sobre O2 y la consideración de que es buen momento para comprar porque las acciones están baratas han sido argumentos suficientes. Telefónica ya advirtió cuando anunció el programa que dependería de la generación de caja y del precio de cotización, así que ha obrado en consonancia.

En sólo doce días de cotización -los que median entre su última comunicación de compra de acciones a la CNMV y la actual- ha adquirido 49,55 millones de títulos, algo más del 1% del capital. Ha invertido en ello unos 620 millones, a los precios de cierre de ayer, y ha llevado el total de su participación hasta el 2,78%.

Las fechas clave van del lunes 7 de noviembre al pasado día 22. En ese periodo Telefónica cayó cerca de un 3% en Bolsa como resaca a la opa anunciada el 31 de octubre. El volumen total de negociación fue de 737 millones de acciones y la operadora absorbió con sus compras el 7% de este papel, en una cifra que podría aumentar si se descuentan las operaciones en bloque y las aplicaciones.

Pero estas adquisiciones pueden no ser las únicas que se han realizado desde la opa de O2. Telefónica depositó el viernes 4 de noviembre en el registro de la CNMV una comunicación de compra de casi 64 millones de acciones. El problema es que, en este caso, es imposible determinar cuándo se ejecutaron las órdenes de adquisición. Es probable que la operadora hiciera algunas en la semana que siguió al anuncio de la oferta sobre la firma británica, pero no se puede saber cuántas.

Sea por la causa que sea, la aceleración del programa de recompra es un hecho. Desde que se puso en marcha -a finales de abril-, Telefónica ha adquirido ya 136,9 millones de títulos, que valen en estos momentos en Bolsa 1.712 millones de euros. Puesto que el programa total suma 6.000 millones hasta fin de 2007, la compañía ha ejecutado ya el 28,5% -la cifra puede ser mayor dependiendo del precio al que se hayan comprado las acciones, que no se ha hecho público-, mientras que sólo ha transcurrido el 22% del plazo previsto para ello. Y eso pese a que los financieros avisaron al inicio del plan de que en este caso las inversiones se concentrarían hacia el final.

Además de estas adquisiciones, Telefónica cuenta en la recámara con 29 millones de opciones, apalabradas recientemente para ser ejecutadas a los precios actuales en 2006.

Está claro que la operadora ha aprovechado la caída bursátil -del 8,22% desde el anuncio de la opa- para reforzar su posición y ayudar al valor, pero no ha sido la única. El propio presidente, César Alierta, también ha contribuido con la adquisición de 164.000 títulos.

Refuerzo en Barcelona

Telefónica ha decidido reforzar su posición en Cataluña y en los últimos días ha tomado dos iniciativas en este sentido. Siguiendo la mudanza de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) a Barcelona, la operadora ha remodelado su área de regulación y ha trasladado a la Ciudad Condal desde Madrid una gerencia de este departamento. Ayer, complementó este movimiento con el anuncio de fuertes inversiones en la capital catalana y la firma de dos convenios con el Ayuntamiento y con su alcalde, Joan Clos.César Alierta fue el encargado de anunciar que Telefónica destinará unos 200 millones de euros a la construcción de una nueva sede corporativa en Barcelona, a lo que se unirá un centro de I+D+I y una universidad corporativa internacional para la formación y el reciclaje de directivos del grupo, con un máximo de 30.000 metros cuadrados de nueva construcción. El plazo del acuerdo es de 10 años.

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